𝐓𝐚𝐤𝐞𝐨-𝐒𝐚𝐧 || 𝑲𝒏𝒀 (HIATUS)

Crueldad

Se encontraba un pequeño niño, el cual con una mirada algo asustada, bastante realmente, Takeo Kamado, un joven de 10 años el cual sin importarle el gran frío y la gran nevada en el bosque, llevaba a su pequeña hermana Hanako en la espalda, después de haber encontrado a toda su familia muerta, excepto ella que por alguna gran suerte solo estaba mal herida y no muerta.

— (¿¡Cómo a pasado esto?!, Fue un oso?!, Un asesino?!) -Takeo no sabía bien nada, sus pulmones le dolían, el gran frío y caminar rápido intentando llegar al pueblo para a buscar ayuda para su hermanita. — ¡Hanako resiste!, ¡Tu puedes, te prometo que te voy a salvar!, Estarás bien -Se oía la voz desesperante de Takeo, mientras aún cargaba a su hermana y intentaba caminar por el fuerte frío y la nieve. — No voy a permitir que mueras!, Tu hermano te va a salvar! -El joven estaba solo, más no se iba a rendir en estos momentos de terror.

Cómo había pasado esto?, Bueno, veamos un día atrás de ese horrible momento. Se encontraba Takeo tomando aquella gran canasta de carbón, su familia solía vender eso para tener dinero y poder vivir al menos en una condición más o menos bien, tenía otros hermanos a los cuales el quería alimentar, no era el mayor de la familia pero quería ayudar a su hermano mayor, Tanjiro.

— Takeo, tienes toda la cara manchada, déjame limpiarte -La madre Kamado se acercó hacia Takeo y le limpio el rostro manchado. — No es necesario que vayas, hace mucho frío y hay mucha nieve

— Pero pronto se acerca año nuevo, y no quiero que Tanjiro se esfuerce tantoo!, Quiero que todos comamos delicioso y tener mucha comida! -Takeo sonrió orgulloso, el le gustaba bastante ayudar a su familia.

— ¡Takeo! -Se escucho de otro niño algo más pequeño, que iba junto a su hermana mayor, Nezuko. — ¿Hoy vas a ir al pueblo a vender?

— ¡Pero es peligroso!, ¡Déjame acompañarte! -Nezuko hablo algo asustada.

— No pueden ir, saben que Takeo es mucho más rápido que ustedes incluso si tú eres mayor Nezuko, aparte de que hay mucha nieve -Kie está vez fue la que hablo.

— Takeooo! -Se acercó el hermano pequeño de Takeo, para rogarle.

— Porfavor!, Te prometo que no te voy a molestar, es por tu bien! -Nezuko igual se acercó, llevando a Rokuta en la espalda.

— Nezuko, Hermana, eres muy amable, pero no puedo desobedecer a mamá y aparte alcanzaré a Tanjiro que ya se fue hace un rato -Takeo sonrió, dándole unas palmaditas en el brazo a Nezuko. — Y a ti tampoco puedo llevarte Shigeru, pero prometo que traeré muchos regalos con Tanjiro para que nos divertíamos juntos todos

— Gracias por esto, Takeo -La madre le dió un Pat a su hijo, con una sonrisa en el rostro algo más calmada.

— ¡No tienes que agradecer mamá! -El niño tomó su hacha y después miro a Shigeru. — Cuida a mamá, Nezuko y Rokuta eh, porque ahora tu eres el hombre de esta casa mientras Tanjiro y yo no estemos -Takeo se rio un poco.

Decidió empezar su camino, despidiéndose de su familia con una sonrisa en rostro.

— ¡Vuelve pronto!

— ¡Cuídate mucho!

Se oía de sus hermanos mientras se despedían de el, y Takeo siguió caminando algo contento, esperando encontrarse con Tanjiro igual para no estar tan solo mientras vendía. En el camino se encontró con su hermana Hanako, la cual solo se encontraba caminando por ahí y decidió acercarse a ella.

— Hey, Hanako, ¿Que haces aquí? -Pregunto Takeo algo confundido.

— Me aleje un poco porque posiblemente Rokuta me usaría para que aceptes ir con nosotros -Le sonrió mientras ponía sus manos atrás de su cabeza. — Ya sabes, el posiblemente haría todo por ir contigo, es el que más extraña a papá desde su muerte, así que intenta estar con todos nosotros -Hanako sonrió. — ¡Vuelve pronto!