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Capítulo 17

–¿Cómo está _____? –preguntó Liam preocupado mientras se acercaba a mi–

–Bien, la dejé durmiendo en mi cama

–No intentaste nada con ella, ¿no? –me mira seriamente–

–Por supuesto que no, jamás abusaría de ella en ese estado

–Bueno más te vale porque si me llego a enterar lo contrario te patearé los testículos y no me importa que seas mi profesor –dijo enojado–

–Tranquilo Payne, nunca haría algo así –aseguré–

–Está bien, espero que estés diciendo la verdad –dice seriamente–

–Claro que digo la verdad –aseguré– y no te enojes porque acá el que tiene que estar enojado soy yo porque anoche la descuidaste –dije enojado al recordar lo irresponsable que había sido–

–No fue mi culpa, además, ¿qué me iba a imaginar que Cameron iría a la misma discoteca esa misma noche y que justo planearía eso? –dijo enojado ante mi desconfianza con su mejor amiga–

–L-lo siento –me disculpé–

–No importa –suspira y se dirige a su pupitre. Empecé a dar la clase cuando de repente un comentario de Cameron me interrumpe–

–¿Dónde está _____, profesor Malik? –habló en frente de toda la clase–

–Supongo que en su casa, Dallas –respondí tranquilamente mientras seguía escribiendo en el pizarrón–

–Podría apostar que está en su departamento y por eso hoy no vino a clases, viejo pedófilo –dijo enojado–

–Estás muy equivocado con lo que dices, Dallas –respondí cínicamente– _____ no está en mi departamento, ¿por qué tendría que estar ahí?

–Sé que ayer te la llevaste de la discoteca, no te hagas el tonto –dijo enojado, toda la clase nos escuchaba y nos miraba atentamente–

–¿Discoteca? ¿De qué hablas Cameron? –dice Liam desentendido metiéndose en la conversación– _____ no fue a ninguna discoteca ayer, estás tan obsesionado con ella que ya estás imaginando cosas que no son –ríe haciendo que toda la clase ría con él–

–Adelante, ríanse –dijo enojado mientras miraba a todos sus compañeros– después no quiero que terminen dándome la razón cuando se enteren que este pedófilo está ligando con mi novia –dijo enojado–

–Ex novia, querrás decir –corrigió Liam– tu mismo te encargaste de arruinar el amor que se tenían, aunque en realidad la única que te dio amor fue _____ porque tu la engañaste desde que empezaron a salir –dijo aún más enojado– ahora deja de inventar idioteces y concéntrate en clases

–No, no es así –gritó– yo la amo –gritó enojado–

–Cuando se ama a alguien no se la engaña –agregó Liam–

–Cierra la boca imbécil –gritó– 

–Lo haré siempre y cuando dejes de inventar cosas

–Joder deja de negarme que _____ fue a esa maldita discoteca –dijo enojado–

–¿Tan resentido vas a estar porque no te pone más atención, Cameron? –respondió Liam en defensa de _____– la engañaste y la perdiste, ya superalo y deja de inventar rumores –rió–

–Ya deja de hacerte el desentendido idiota –grita enojado mientras se acerca a Liam con intenciones de golpearlo–

–Bueno ya basta –grité– Cameron regresa a tu lugar si no quieres que el director te suspenda de nuevo –dije enojado a lo que Cameron me miró con odio y se sentó en su pupitre–

Narra _____

Me desperté asustada al ver que no estaba en mi habitación y que traía puesta la remera de un hombre. Joder, ¿en dónde carajos me había metido? Agarré mi celular para revisar mis mensajes y me calmé al leer el mensaje de Liam.

"Li: ¿Cómo estás preciosa? ¿Zayn te hizo algo? Te cuento que estás en su departamento, le pedí que te lleve ahí para que tus padres no te vieran ebria, espero que no te moleste ;) ahora está en la escuela pero en breve irá para allá :)"

Sonreí tontamente al saber que estaba en el departamento de Zayn y que tenía puesta una remera suya e inmediatamente le respondí el mensaje "Estoy bien, no me hizo nada. Desde luego que no me molesta. Bueno lo espero entonces :)" dejé el celular en la mesita de luz y bajé a la cocina. De repente escuché que abrían la puerta y vi a Zayn, éste al verme se acercó a mi y me saludó.

–Hola _____ –se acercó a mi y me saludó con un beso en la mejilla– ¿Cómo estás? –preguntó preocupado–

–Bien, supongo –reí– ¿y tu cómo estás? te noto tenso –acaricié suavemente su mejilla para tranquilizarlo–

–Bien aunque con un poco de mal humor, hoy Cameron me hizo un escándalo en frente de toda la clase –suspira– ¿para ti soy un viejo pedófilo? –pregunta tristemente– sé que hay mucha diferencia de edad entre nosotros pe... –lo interrumpí–

–Claro que no eres eso Zayn, eres más grande que yo, eso sí –reí suavemente– pero aún así sigues siendo joven, y lo más importante, no eres eso que dice Cameron –acaricié nuevamente sus mejillas–

–Gracias _____, me hace tan bien escuchar tus palabras –me abrazó fuertemente–

–No hay de qué –le correspondí el abrazo y fruncí el ceño al ver sábanas y colchas en el sofá– ¿dormiste aquí? –pregunté mientras me separaba del abrazo y señalaba el sillón–

–Sí, no quería incomodarte así que dejé que durmieras en mi cama y yo vine aquí –respondió dulcemente–

–Pero dormiste incómodo por mi culpa –hice un pucherito con mis labios–

–Eso es lo de menos, lo que más me importa es que hayas dormido cómoda –dijo dulcemente–

–Gracias Zayn y gracias también por salvarme ayer –lo abracé fuertemente hundiendo mi cabeza en su pecho–

–De nada preciosa –me correspondió el abrazo y me apegó aún más a el– ¿sabes? esa remera te asienta más bien a ti que a mi –susurró en mi oído haciéndome estremecer–

–¿Tu dices? –reí– me queda enorme –me separé de el para que pueda observarme mejor–

–Sí, yo lo digo –sonrió y me abrazó– ¿tienes hambre? –preguntó mirándome–

–Sí, de ti –susurré atrevidamente sorprendiendo a Zayn y éste como respuesta me robó un beso–

–Yo igual de ti princesa –susurró entre medio del beso mientras me abrazaba por la cintura, lo agarré del cuello para profundizar más el beso y segundos después metió su lengua en mi boca. Subí mis manos a su cabello dándole a entender que me encantaba lo que hacía y como respuesta me agarró del trasero apegándome aún más a el como si eso fuese posible– ahhhh –gimió sobre mis labios al tocar mi trasero ya que la tela de la remera era fina lo cual lo hacía tener un mejor contacto con mi piel– si no paramos ahora no podré hacerlo después –dijo con voz ronca entre medio del beso–

Mi Nuevo ProfesorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora