Una leona en Fairy Tail (Sting x Oc)

Capítulo 58

Dos meses después

Narra Sting

Hay que ver que boda, pero bueno hace dos meses que volvimos y hoy venía Sara a Crocus para pasar el fin de semana, la esperaba en el gremio ya que viene con los polvos Fiu a través de la chimenea del maestro.

Sara (Saliendo): Lamento el desorden maestro Jenma

Maestro: No pasa nada, anda vete que te esperan y pasa un buen fin de semana

Sara: Gracias e igualmente

En cuanto me vio me abrazó y la lleve a casa, nos fuimos al mercado para comprar algo para comer y de paso hacíamos la compra, estábamos tranquilos hasta que apareció Melody.

Melody: Así que me dejaste por ella

Sting: ¿Qué es lo que quieres?

Melody: Tu y yo en la cama como antes

Sting: Siento decirte esto pero estoy con ella

Melody: No podías haberte conseguido nada mejor

Sara (Molesta): Veo que las cosas no cambian, si el ya te ha dicho que te vayas una vez, que es lo que no entiendes

Melody: Esto no va contigo zorra

Sara: Eso lo eres tú al ir rogando por ahí, porque no te vas, no te das cuenta de que están empezando a murmurar o es que no lo ves

Y era cierto, al poco apareció el chico de la otra vez que la miraba desde lejos pero no decía nada, cuando Melody lo vio quiso ir con el pero se vengo de ella.

Chico: Se ve que no has podido cambiar ni un ápice, lo siento Melody pero hemos terminado

Melody: Tu no puedes dejarme

Chico: Acabo de hacerlo, que te vaya bien (Marchándose)

En cuanto se fue, esta se lanzó sobre Sara pero no contó con que la hechizara de tal manera que no pudiera moverse, al poco vinieron los guardias y se la llevaron una vez aclaramos todo y que ella deshiciera la maldición y seguimos nuestro camino a casa, cuando llegamos vi una nota de Rouge diciendo que vendría a la noche.

Sting: Una cosa ¿no sabrás algún hechizo de silencio?

Sara (Divertida): Si que lo hay, ¿por qué?

Sting: Me preguntaba si podías ponerlo en mi habitación

Sara: Claro ahora lo pongo

Sting: Bien

Se fue a poner el hechizo en lo que yo preparaba la comida, al poco la sentí en la puerta de la cocina.

Sara: Ya está, no se escucha nada, pero nosotros podremos escuchar si alguien entra a la casa

Sting: Por cierto, ¿Dónde has dejado a Kira?

Sara: Ha preferido quedarse con Wendy, afortunadamente y para la sorpresa de todos Charlie la tolera bastante bien, por qué la pregunta

Sting: Porque quiero hacerlo en lugares que no son muy éticos que digamos

Sara (Riéndose): Ya quieres empezar, por cierto ¿Dónde esta Lector?

Sting: Se ha ido con Rouge y Jukino un rato

Sara: Ahora entiendo que quisieras empezar

Sting: Tu que crees si te has puesto peleona y eso me gusta

Sara: Y si comemos primero y luego nos divertimos toda la tarde

Sting: Yo prefiero más hasta el día siguiente, pero lo que digas princesa

Sara: Pues a comer

Narra Sara

Nos sentamos a comer y he de reconocerlo no todos los días encuentras a un chico que cocine tan bien, cuando terminamos me puse a fregar los platos y no me dejó quitarme los guantes ya que me alzó sobre el fregadero y me empezó a besar.

Sara: Sting no te apetece ir a la cama

Sting: Ahora no

Sara: Bueno pues entonces adelante tigre

Me levanto y me tumbó en la mesa de la cocina, me acarició sobre la ropa y como llevaba falda solo hizo a un lado mi ropa interior antes de entrar, intento no gemir muy fuerte ya que no quiero molestar a los vecinos, pero es que es imposible.

Sting: Vamos princesa no te contengas

Sara: Pero ¿y tus vecinos?

Sting: Tranquila están acostumbrados

Sara: Pero yo no quiero que nos oigan hacer el amor

Sting: Puede que tengas razón, pero así es más divertido

Siguió azotando mi interior hasta que salió, yo quería acabar y se que el también, por lo que de un movimiento lo tumbe en el suelo me quite la ropa interior y me puse delante del mini Sting, aunque de eso tenga poco, empecé a jugar con el, mi novio tardo un poco en darse cuenta de lo que quería hacer pero enseguida captó el mensaje, yo acabé mucho antes pero el no, por lo que se sentó en el suelo y puso las manos en mi cabeza haciendo que fuera más rápido hasta que acabo en mi boca, cuando logre separarme me levante y escupí todo lo que pude en el fregadero, eche agua para quitarlo.

Sting: Lo siento (Besándome) me he dejado llevar

Sara: No pasa nada

Sting: Venga ve al cuarto yo limpio esto

Sara: De eso nada entre los dos lo haremos más rápido

Sting: No sirve de nada discutir contigo (Besándome) siempre ganas

Limpiamos y nada más dejar las cosas en su sitio, cogí lo que había dejado en el suelo y me cogió para ponerme sobre su hombro para llevarme a su cuarto como un saco de patatas, al llegar me dejó en el suelo y entre besos nos deshicimos de la ropa.

Sting: No me canso nunca de verte así princesa

Sara: Sabes yo tampoco es que me queje (Acariciando su abdomen)

Me beso y esta vez se puso protección para luego tumbarse en la cama conmigo debajo, entró de una ya que seguía muy lubricada de antes y al estar sensible gemía más alto, creo que eso le gusta, no disminuyó el ritmo de sus embestidas lo que provocó que acabásemos enseguida, cuando salió me dejó un buen chupetón en el cuello seguido de un pequeño mordisco en la cadera derecha.

Sting: Siento el mordisco, es la primera vez que me pasa

Sara: No pasa nada, veo que todavía tiene ganas de jugar (Acariciando su amigo)

Sting: Si espera que me pongo otra protección y luego prepárate princesa

Lo acerque a mi, una vez se cambio la protección y mientras volvía a embestirme yo por un momento perdí el control de mi cuerpo y sin darme cuenta active mi dragón force de agua y le mordí entre el cuello y la clavícula, por lo que paro sin salir de mi.

Sara: Lo siento no se que ha pasado

Sting: Tranquila

Siguió moviéndose despacio ya que no teníamos prisa, cuando la puerta del cuarto se abrió de repente, menos mal que no quitamos del todo las sábanas y me tapaban un poco, pero aún así se ve suficiente y doy gracias a que Sting me tapa ahora mismo, miramos y vimos a Rouge y parecía aterrado.

Rouge (Girándose al vernos): Lo siento pero esto es raro os necesitamos a los dos

Nos miramos y le hicimos salir de la habitación, Sting salió de mi y nos vestimos con la misma ropa de antes, que será lo que quería decirnos.