Hola,
Me gustan tus dientes.
Son tan bonitos,
Son tan blanquitos.
Me gustaría poder verlos más,
Me parecen tan blancos,
Tan lisos
Tan finos.
No veo nada malos con ellos,
No tienen mácula ni mancha alguna,
No hay caries
No hay encías pálidas.
Tienes un preciosos aliento a muerto,
Una mirada vacía y seductora,
Unos labios carnosos,
Una sonrisa impactante.
Una rubor en tus mejillas me susurra amores,
Esa comisura en los labios me sugiere sensaciones,
Tu puente de nariz me decora la vista,
Pero no me gustas.
Me gustan tus dientes
Me gusta como huelen,
Me gusta su color,
Me gusta imaginar cómo saben.
Me gustaría besarte solo para probarlos,
Me gustaría cantar y bailar para verte sonreír,
Me gustaría ser tu persona favorita para poder siempre verlos,
Me gustaría enamórate para estar ahí cuando los dejes salir.
Me gustan tus dientes,
Pero no me gusta donde los tienes,
Escondidos, prisioneros, ocultos y lejos de mi,
Tu, no me importas,
Me enamoré de tus dientes, no de ti.
Ahora, sí me disculpas,
Quiero verlos,
Enseñamelos,
¡Abre la boca!
¿Te atreves a negarme ver a mis preciosos?
¿Tú? Maldita prisión estúpida
Yo, los liberare mis blanquitos queridos
Si no quieres abrirme la puerta por la buenas, será por las malas.
Unas tenazas, un bisturí y unas gasas,
Hora de traer a mis amores la mundo,
¡Deja de gritar, escoria!
Tus gritos me molestan, así que te romperé el cuello.
Ese sonido de huesos quebrados me encanta,
Pero tú cabeza aún me odia,
Pues este martillo la puede callar
Una, dos, tres, cuatro y cinco, de seguro lo logran.
Eso suena mejor,
Ahora primero los bellos incisivos,
Luego esos sensuales caninos,
Esos guapísimos premolares,
Sin mencionar esos esbeltos molares.
Pero, ¿Dónde están?
¿Dónde están mis bellezas?
Esas malditamente cadetes muelas del juicio,
Eureka!
Los he conseguido, son míos, míos, míos, míos para siempre.
Y SABEN MUY BIEN, MEJOR DE LO QUE NUNCA IMAGINE.
¡Hey!
¡Tus dientes también me gustan mucho!
👁️👄👁️
¡DÁMELOS!
