NOAH

CAPÍTULO VIII

26 de diciembre

Un nuevo día una nueva historia, ese es mi pensar por las mañanas, recibo el día con ansias.

Llegue al trabajo y allí estaba Johny esperándome
para abrir la tienda

Johny: ¡Buenos días!

Noah: Buenos días John, parece que alguien
amaneció con buen humor hoy

Johny: la verdad que sí, me pasaron cosas buenas
el día de ayer

Noah: ¿¡que!?, enserio

Johny: si, muy enserio

Noah: abramos la tienda y luego me cuentas ¿te
parece?

Abrimos la tienda, comenzamos a atender a la gente, hoy la responsabilidad de abrir y cerras le quedaba al gerente, y a mi me dejaron la opción de recibir vacaciones antes o después de año nuevo, así que decidí mejor después de año nuevo.

Mientras John y yo atendíamos la caja me comenzó a contar que le había propuesto matrimonio a su novia después de 2 años y medio de ser novios, él estaba muy feliz que no paraba de hablar de su prometida, que comenzó a hablar sobre los planes del casamiento y demás solo esperaba que me pidiera a mi ser uno de sus padrinos o algo así… aunque con suerte seria invitado, Sali de trabajar temprano y me dirigí a la estación de buses, y antes de subir al bus me recordé de la nueva cafetería… y de la chica del parque, mi mente estuvo tan ocupada que había olvidado ese tema, parece que las curvas de una joven mujer hacen que un hombre olvide por completo algunas cosas.

Pensé — ¿voy al parque, a la cafetería o regreso a casa?

Así que decidí pasar a la cafetería a comprar un
capuchino para llevar a casa.

Llegué a casa hice mi rutina nocturna, y así fue durante los días siguientes, aun no respondía a la pregunta que Nicole me había hecho, aunque no había abierto su mensaje.
Pasaron cuatro días, era víspera de año nuevo, digo era 30 de diciembre no había hablado con Manuel los días anteriores, ni con Nicole ni nadie…
Aun no sabia que responderle a Nicole, no estaba
seguro que responder ante esa situación, entonces sin planes para el 31 mi única opción era quedarme en casa, hablar con mi familia en Guatemala, y
quizás ver películas y dormir temprano.

Estando sentado a la orilla de la puerta de mi departamento

PING -suena mi celular en la cocina- me levanto a
ver, pensé que tal vez era Manuel. Pero no, era el
número…El mensaje decía

“Hola Noah, espero que estas bien, y aunque se que no responderás, te deseo un buen fin de año, bueno… llámame”

31 de diciembre
Me levanto muy temprano, hago una taza de café,
puesta un pijama de rayas, salgo a la terraza y veo a la ciudad mientras el frio entraba a mis pulmones

“HOY SERA UN GRAN DIA”

Llego a trabajar mientras abrimos la tienda John me pregunta que si tengo planes para después de salir.

Le dije que, si tenía, en la noche iba a
salir a cenar.

Mientras le digo eso, veo pasar a una chica alta con corte de fleco, camine hacia la puerta, pero al
salir la había perdido de vista
¿habrá sido la chica del parque?—me preguntó

Johny: ¿Qué pasa?

Noah: nada, me pareció ver a alguien.

Johny: ¿novia?

Noah: no

Johny: ¿Quién?

Noah: una chica que conocí hace mucho tiempo en el parque… desde ese día ya no la volví a ver, creí haberla visto

Johny: a el amor, el amor te hace ver cosas

Noah: oye tranquilo, eso no es amor. Solo creí
haberla visto y nada mas

Johny: si como no, y yo me voy a casar, espera,
si lo hare — dice mientras se rie

Noah: ¿seguirás restregándome tu compromiso en la cara?

Johny: por supuesto que si

Noah: ¿cuándo dejara de pasarme esto? - digo frustrado –

Johny: me voy a casar

Noah: detente porfavoooooor – Sali corriendo –

Johny: me voy a casar – me sigue –

Después del bochinche que me hizo Johny Sali a
almorzar, tome mi teléfono, revise algunas cosas y veo mensajes en mi buzón.