TodoBaku (🍋)

¿¡Por qué dos?! ❤️🤍

- ¡Oye! Bastardo... - exclamó Bakugou entrando a su habitación, sin embargo, a pesar de haber entrado muy decidido, su voz se fue apagando al ver a Todoroki... - Mitad... ¿mitad? - expresó ya más confundido.

Parpadeo varias veces, ¿por qué estaba viendo doble? ¿se había golpeado en la cabeza? Imposible. Entonces, ¿por qué se veían dos Todorokis en su habitación?

Pero rápidamente noto unas ligeras diferencias entre lo que creía eran visiones; el de la derecha tenía el pelo totalmente blanco, ojos grises, sin su característica cicatriz y mostraba una expresión seria. Por el otro lado, estaba otro Todoroki con el pelo totalmente rojo, ojos turquesa, su cicatriz y una expresión más cálida. 

- Bakugou... - hablo el Shoto de la derecha.

- Kats, mi amor... -  dijo al mismo tiempo el Shoto de la izquierda.

¿Qué mierda era esto? ¿Acaso estaba soñando o qué? Eso era lo que pasaba por la cabeza del cenizo. Entonces, ambos Todorokis dieron un paso hacia Bakugou, el cual al seguir confundido, retrocedió.

- Tu cara lo esta asustando, ¿qué no puedes verlo con amor? - le cuestiono el Todoroki de pelo rojo al de pelo blanco.

- Tú cállate... - respondió el otro Shoto, pasando su seria mirada al suelo. Este Todoroki le recordaba al bastardo mitad-mitad que había iniciado el curso; serio, sin querer acercarse a los demás, con una mirada sumamente decidida pero algo ausente.

- Kats, te extrañe, ¿dónde estabas? - expreso nuevamente el Shoto de ojos turquesas acercándose al más bajo para abrazarlo, logrando captar la atención del otro Shoto.

Y este Todoroki de pelo rojo era como esa versión que sólo Bakugou conocía; uno más expresivo, romántico e intenso. Al parecer los dos eran como una exageración de los lados del Shoto invierano.

Mientras el ojirubí se seguía cuestionando qué pasaba, el Shoto pelirrojo aprovecho para tomar su rostro con una de sus manos para que sus rostros se acercaran, eso con la intención de besarlo. Sin embargo, el Shoto albino logró poner antes su mano en los labios de Katsuki.

- Ehhh... ¿Qué te sucede? ¿No ves que necesito de sus labios? Realmente los extrañaba. - hablo coqueto el ojiazul.

- No puedes besarlo... - fue lo único que dijo el albino, tomando a Kats por detrás, abrazándolo de la cintura con su mano libre.

- No tienes derecho a decir eso. - comento el pelirrojo, mirando ahora desafiante a su otro yo. - Además, a Kats le gusta que lo bese, siempre se derrite con mis besos. - hablo ahora, alzando delicadamente la cara del cenizo con su dedo índice.

- Claro, que no. Estoy seguro de que no le gustas.- comento el ojígris, jalando más a Bakugou.

- ¿Ah sí? ¿Por qué no lo comprobamos? Estoy seguro de que yo soy mejor que tú.- amenazó el pelirrojo, legándose al cenizo.

- ¿Mm? ¡Mmmm! - comenzó a gruñir el cenizo al dejar de pensar en qué diablos pasaba y comenzar a concentrarse en lo que esos bastardos decían. Pero él ya no tenía voz ni voto en esta competencia, y antes de pudiera luchar contra esos dos, fue arrojado a su cama. - ¡Bastard.... Bastardos! - exclamó, pero el Shoto de pelo rojo se coloco detrás de él y comenzó a subir su playera, mientras que el albino paso a quitarle los pantalones.

- Calma, Kats. Te haremos tocar cielo, pero debes decidir quién lo hace mejor ¿bien? - expresó el ojiazul recargándose en la pared y recargando al cenizo sobre él al mismo tiempo que volvía a tomar el rostro del menor con su mano para que sus labios se unieran por fin.

Shoto rápidamente se abrió paso en la boca de Katsuki y comenzó a recorrerla para después jugar con su lengua. Esto no fue bien visto por el Shoto albino, y como no pensaba perder esta batalla por su amado, tomó el miembro del menor con una de sus manos para masturbarlo y después meterlo en su boca, subiendo y bajando, pasando a volver a masturbarlo con su mano mientras lamía la punta.