➬ Ella estaba enamorada de él, él la quería sólo para él, creando un amor enfermizo que acabaría en un final desgarrador, acompáñame a ver esta historia descubriendo los más obscuros y retorcidos secretos y deseos que puede albergar lo más profundo...
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3ra señal: 𝑰𝒈𝒏𝒐𝒓𝒂𝒓
Advertencia: +18
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Estabas caminando tomada de la mano con tu novio, a lo dejos divisaste a una persona conocida, era tu mejor amigo, Giyuu. Tenías AÑOS, que no lo veías, se había ido unos años al extranjero a estudiar. Te soltaste de la mano de Iguro, él te miró extrañado, comenzaste a correr en dirección hacia el pelinegro.
- ¡¡GIYUU!!
Seguías corriendo eufórica, él volteó al escuchar la mención de su nombre, viéndote correr hacia su persona, rápidamente extendió los brazos esperando para recibirte en ellos.
- ¡Princesa!
Llegaste con él lanzándote a sus brazos, él te recibió gustoso mientras tomaba tu cintura y te levantaba dándote vueltas en el aire.
- ¿Cuándo volviste? ¿Y por qué no me avisaste? Te extrañé mucho....
- Perdóname por no haberte llamado, regresé hace unas semanas, y como he estado recibiendo las cosas para la mudanza no pude avisarte.
Acariciaba tu mejilla con suavidad, cualquiera que los viera pensaría que son una feliz pareja, incluso Iguro miraba desde lejos la escena apretando sus puños con fuerza dejando blancos sus nudillos por la falta de sangre al hacer presión.
Estaba molesto, no, estaba que explotaba de los celos, su interior hervía en rabia, ese pelinegro, ESE MALDITO PELINEGRO, estaba harto de él, veía como actuaban de manera cariñosa, y lo odiaba, suspiró intentando calmarse, se acercó a ustedes, como traía su mascarilla no podían ver su expresión facial.
- ¡Obanai!, ¡Mira! ¡Giyuu volvió!
Dijiste eufórica mientras seguías aferrada al ojiazul, Tomioka sentía la pesada mirada de Obanai sobre él, así que se aclaró la garganta mirando al heterocromo, que era más bajo que él.
- Iguro-san....gusto en verte....
(N/A: Según tengo entendido, los japoneses cuando no hay un lazo muy cariñoso llaman a la persona por su apellido y un honorífico formal)
- Lo mismo digo Tomioka-san
Sentías el ambiente tenso entre ellos, por lo que decidiste soltarte de los cálidos y fuertes brazos de Giyuu para dirigirte a tu novio y tomar su mano, él rápidamente te abrazó contra su pecho mirando al ojiazul.
- ¿Hace cuánto llegaste?
Preguntó el de ojos bicolores al más alto. No se sentía confiado con Tomioka, más al saber los sentimientos de este hacia ti.
