Alejándonos de lo que nos daña

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✎Advertencia✎ En esta historia Wei Ying y Cangse Sanren fueron usados como personas problemáticas o "malos", esto con el fin de ayudar a la trama, si te disgusta por favor no sigas leyendo.

✎Aclaración✎ Los diálogos se encuentran en cursiva, frases que recalquen algo se encuentran en negrilla y cursiva. 




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Recuerda que de niño no era caprichoso o bueno tenía miedo de que sus padres lo regañaran más de lo que ya lo hacían y no estaba dispuesto a que eso empeorara por una niñería. Claro que este no es el pensamiento que debería tener un niño de cuatro años, pero no lo culpen, es culpa de su padre por no querer ir a terapia de pareja cuando su madre lo sugirió.

La gran y poderosa araña violeta tenía un límite y ese límite fue rebasado cuando descubrió que su esposo había vuelto a entablar amistad con su antigua novia, quien se había casado con el mejor amigo de Fengmian, irónico, después de todas las cosas que tuvo que pasar Madam Yu (desde peleas con la familia de su esposo, verse obligada a dejar de trabajar por sus hijos, soportar a su esposo indiferente, entre otros dolores de cabeza), su padre le tenía que salir con que  Wei Changze, había muerto por una enfermedad hace unos meses y se sintió mal por la esposa de su mejor amigo. Su madre incrédula acepto que la ayudara a estabilizar las finanzas de la familia Wei, acepto que la ayudara con el mocoso ese, que se ausentara para ayudarla, y aunque detestara a la mujer, comprendía su situación. Pero jamás aceptaría que sugiriera que la mujer se mudase a su casa. Recuerda a su madre colérica le gritando "Jiang Fengmian, acepto todas tus estupideces, pero ni se te ocurra hacer esto, o va a terminar muy mal, y no para mí". Recuerda ver a su hermana intentando calmarlos y luego ser mandada a su habitación junto a él. Esa tarde hubo más gritos incluso cosas quebrándose, mientras el consolaba a su llorona hermana mayor quien tenía once años, y era demasiado sensible para estas situaciones.

Meses después la casa al otro lado de la calle fue comprada por nada más ni nada menos por Cangse Sanren y su hijo. Desde el primer día que llegaron, el pequeño Jiang Cheng noto las preferencias de su padre y hermana por estos dos. Intento convencerse que su hermana lo hacía con inocencia al ver a un niño nuevo con una reciente perdida, y su padre siempre fue un idiota como solía decir su madre en sus conversaciones privadas, pero esto es un secreto que no se debe decir a Yanli o se podría triste. Todo estaba bien porque normalmente eran ellos quienes iban a cenar a la casa de madre-hijo, hasta que su padre decidió traerlos a su casa (cuando su madre no estaba en la ciudad) y el jodido Wei Ying se puso a llorar como loco cuando vio a sus tres preciosas cachorritas, como olvidar que la Canse sanren y su padre patearon a sus cachorritas y su hermana le gritaba furiosa por no encerrar a sus feos perros. Luego de que las alejo con ayuda de su nana, su padre dio la orden de sacarlas de la casa. En ese momento odio por primera vez a su padre, a esa mujer y a su hijo, desde ese momento la relación cercana con Yanli se fracturo.

Mamá y A-ChengDonde viven las historias. Descúbrelo ahora