Han jisung

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—Y aparentemente ¡estaban teniendo sexo en la habitación de los padres de Vanessa !—
Han jisung  miró fijamente a su mejor amigo, Sohn Erik, a través de la mesa. Era dos días antes de que la escuela comenzara y estaban sentados en la terraza del café inspirado en Francia, Rive Gauche, en el centro comercial King James, tomando vino tinto, comparando Vogue con Teen Vogue, y contando chismes. Erick  siempre conocía la mejor basura de las personas.Jisung  tomó otro sorbo de vino y notó a un tipo de unos cuarenta y tanto mirando lascivamente hacia ellas. Un normal Humbert Humbert*, pensó jisung , pero no lo dijo en voz alta. Erick no comprendería la referencia literaria, pero sólo porque jisung  era el chico más solicitado  en Rosewood Day no quería decir que estuviera por encima de probar los libros de lectura recomendada para el verano en Rosewood Day de vez en cuando, especialmente cuando estaba acostado a lado de su piscina con nada para hacer. Además Lolita parecía deliciosamente sucio.
Erick se giró alrededor para ver a quién estaba mirando jisung . Sus labios se curvaron hacia arriba en una traviesa sonrisa.

Se habían hecho amigos el verano entre octavo y noveno grado, cuando ambos  habían sido echados de las pruebas para el equipo de fútbol americano  de primer año de Rosewood. Juraron que entrarían al equipo al año siguiente, decidieron perder toneladas de peso –así podrían ser los más sexys y alegres chicos  que los chicas  animaban . Pero una vez que consiguieron ser delgados y tener un cuerpo de ensueño  , decidieron que pertenecer al equipo era pasado y que las jugadores  eras perdedores , entonces nunca se molestaron en volver a hacer la prueba para entrar al equipo.
Desde entonces, Jisung y erick  compartían todo, bueno, casi todo. Jisung no le había dicho a Erick cómo había perdido peso tan rápidamente. Era demasiado grotesco como para hablar de eso. Mientras que una dura dieta de semillas de fruta era sexy y admirable, no había nada, nada glamoroso sobre comer una tonelada de basura mantecosa, grasienta y de preferencia llena de queso y luego vomitar todo eso. Pero jisung  estaba por sobre ese pequeño mal hábito por ahora, entonces realmente no importaba.
—Sabes que ese tipo había metido la pata —susurró Mona, reuniendo las revistas en un montón. —¿Qué va a pensar Yeji?
—Se reirá —dijo Jisung
—Uh, no pienso eso.
Jisung se encogió de hombres. —Podría.
Erick resopló. —Si, deslumbrando a extraños va bien con una promesa de virginidad.
Jisung miró hacia abajo a sus zapatos negros  Michael Kors. La promesa de virginidad.Jisung  era increíblemente popular, tenía un extraordinariamente caliente novia , Hwang yeji  -la chica que había deseado desde séptimo grado- que se había estado comportando un poco extraña  últimamente. Él siempre había sido el Sra. All-American gril Scout*- mientras era la voluntaria en su antiguo hogar y sirviendo pavo a los sin casa en el Día de Acción de Gracias –pero anoche, cuando jisung , Yeji ,Erick , y un puñado de otros chicos pasaban el rato en el jacuzzi de cedro de Jin , encubiertamente bebiendo Coronas (marca de cerveza), orgullosamente, que había firmado una "promesa" de virginidad y había prometido no tener sexo antes del matrimonio. Todos, jisung  incluido, habían estado demasiado atontados para responder.
—Élla no hablaba en serio —dijo jisung con seguridad. ¿Cómo podría haberlo hecho? Un puñado de niños firmaban la promesa; jisung  calculaba que sólo era una tendencia pasajera, como esos brazaletes de Lance Armstrong o Yogalates*.
—¿Tú crees? —Erick sonrió con satisfacción, apartando su largo flequillo fuera de sus ojos. —Vamos a ver qué sucede en la fiesta de Yuna el próximo viernes.
Jisung apretó sus dientes. Parecía como si Erick  se estuviera riendo de el . — Quiero ir de compras —dijo, levantándose.
—¿Qué te parece ? —preguntó Jisung .
—Sensacional.
Dieron un paseo por la nueva sección de lujo del centro comercial King James, que tenía un Burberry, un Tiffany's, un Gucci, y un Coach; olía al último perfume de Michael Kors; y estaba abarrotado de chicas lindas de-regreso-a-preparatoria con sus bellas mamás. En un viaje de compras a solas hace unas semanas atrás, jisung  había visto a su antiguo amigo  Kim seungmin deslizándose un nuevo Kate Spade, y recordaba cómo ella solía hacer una orden especial de una temporada entera que valía la pena de bolsos de hombro de nylon desde Nueva York.
Hanna se sintió divertida por saber ese tipo de detalles sobre alguien de la cual ya no era amigo . Y mientras veía a Seungmin examinando las valijas Kate Spade de cuero, Jisung  se preguntó si Seungmin estaba pensando lo que el estaba pensando: esta nueva ala del centro comercial era justo el tipo de lugar que Jeongin hubiera amado.Jisung a menudo pensaba en todas las cosas que Jeongin se había perdido – la fogata de regreso a casa el año pasado, la fiesta de karaoke de Jackson want  para sus dulces dieciséis en la mansión de su familia, las fundas de cuero para iPod nano Channel... iPod nanos, en general. Pero ¿la cosa más grande que Jeongin se había perdido? El cambio de imagen de jisung , por supuesto –y lo que el  había hecho fue como un cañonazo. A veces, cuando jisung  daba vueltas en frente de su espejo de cuerpo entero, pretendía que Jeongin estaba sentado  detrás de el, criticando sus conjuntos de la forma en que solía hacerlo. Jisung había desperdiciado tantos años siendo un gordo y pegajoso perdedor, pero las cosas eran tan diferentes ahora.
El y Erick se dirigieron hacia Tiffany's; estaba lleno de vidrio, cromo, y luces blancas que hacían que los impecables diamantes brillaran incluso más. Erick merodeaba alrededor de las vitrinas y entonces levantó las cejas hacia jisung .
—¿Tal vez un collar?
—¿Qué hay sobre un encantador brazalete?
—Perfecto.
Caminaron hacia la vitrina y miraron el encantador brazalete de plata con un prendedor en forma de corazón. —Tan lindo —suspiró erick .
—¿Interesados? —Preguntó una elegante dependienta mayor. —Oh, no lo sé —dijo Jisung
—Se le vería bien a tu novia no crees . —La mujer abrió la vitrina y tanteó alrededor por el brazalete. — Está en todas las revistas.
Jisung le dio un codazo a Erick . —Pruébatelo tu ya que tienes el mismo tamaño de las manos de yeji
Erick lo deslizó en su muñeca. —Es verdaderamente hermoso. —Entonces la mujer se giró hacia otro cliente. Cuando lo hizo, Erick deslizó el brazalete fuera de su muñeca y lo metió dentro de su bolsillo. Al mismo tiempo, jisung apretó sus labios y le hizo señas a otra dependienta, una chica de cabello rubio-miel que usaba brillo labial color coral.
—¿Puedo ver ese brazalete de ahí, el con el amuleto redondo? —¡Seguro!— La chica abrió la vitrina. —Tengo uno de esos para mí. —¿Qué hay sobre los aros a juego, también?— jisung los señaló. —Por supuesto.

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