Your Eyes Tell •| Taekook |•

Capítulo 7

Después de la escena que Taehyung había presenciado con Park y Jeon, este se dirigió hacia el pequeño mercado donde su abuela tenía un puesto de comida, mismo donde el trabajaba. Al llegar saludó a su abuela como de costumbre y fue hacia su moto que siempre dejaba estacionada en el mismo lugar.

De la caja donde se guardaban cosas sacó una caja de cigarrillos y un encendedor, tomó un cigarro y lo prendió para después llevarlo a sus labios y darle una calada profunda mientras se recargaba en la pared, luego de expulsar el humo guardó la caja y el encendedor.

Continuó fumando y al cabo de un rato decidió apagar el cigarrillo y dirigirse hacia el puesto para ayudar a su abuela quien se había enojado porque Kim había llegado tarde a su trabajo.

—Abuela, ya estoy acá, ¿tengo que repartir algo justo ahora?

—Ahí estás, todavía que llegas tarde te das tu tiempo para hacer esa horrible cosa —gruñó.

—Se llama fumar, y lo siento, salí con un chico y no nos dimos cuenta del tiempo

—Como sea, por eso es que no te pago, de por sí las propinas te las gastas en tus fumadores esos

—Cigarros, madam

Kim soltó una risa haciendo que su abuela se enfadara y le comenzara a dar trapasos en su espalda mientras lo corría de la diminuta cocina andante, una vez que lo sacó bufó y le dio una bolsa de plástico con una dirección que de inmediato Kim tomó.

—Ve a entregar esto, andale

El peli azul asintio y besó la mejilla de la señora mayor para después ir hacia su moto y poder llevar la comida a la dirección que le había indicado su abuela.

Al llegar entregó el pedido correctamente a una chica delgada que parecía no pasar de los veinte años, Kim estaba siendo amable con ella pero la chica al pensar que le estaba coqueteando le dió algunos billetes extra —cinco dólares— que Kim intentó no aceptar pero después de tanta insistencia los terminó tomando.

Regresó al puesto de comida con su abuela y le dio todo el dinero exceptuando lo que era extra para él, eso se lo guardó en su billetera. Estubo repartiendo hasta que dieron las diez de la noche, a esa hora estaba pasando por el edificio de Jeon pero en el piso cinco, así que después de repartir decidió pasar a ver como estaba después de lo que ocurrió con Park.

Al llegar afuera de su departamento tocó la puerta un par de veces pero no hubo respuesta, volvió a insistir y fue cuando escuchó la voz de Jeon del otro lado de la puerta.

—No quiero que estés aquí... Vete...

Kim suspiró levemente al escuchar la voz de Jeon así entre cortada y mal, iba a alejarse pero supuso que el castaño lo estaba confundiendo por el peli negro, por lo que con una leve sonrisa se atrevió a hablar.

—Soy Taehyung, ¿aun así no quieres que esté aquí?

Hubo un silencio por algunos segundos y después Jeon decidió abrir la puerta dejando que Kim pasará, de inmediato éste acaricio la mejilla de Jeon con delicadeza notando que tenía algunas lágrimas marcadas.

—Pensé que eras Jimin

—Igual que la primera vez que nos vimos

Jeon soltó una suave risa sin muchas ganas y cerró la puerta con el seguro solamente, se dirigió hacia el sillón con mucho cuidado y Kim lo siguió hasta que ambos tomaron asiento.