Your Face | Leondy Two-Shot

Pt2. "I Just Really Like Your Face,,"

Con el paso de las semanas, Sandy siguió escribiendo sobre Leon cada que tenía la oportunidad, lo tomaba como una forma de expresar todo lo que odiaba de el y lo mucho que lo molestaba, llegando al punto en el que todo lo que escribía iba a dirigido hacia el, básicamente se había vuelto su musa.

Sin embargo, el castaño siguió acercándose al más alto cada que tenía la oportunidad, realmente quería que fueran amigos, ya que al parecer no lograba entender que el simplemente lo detestaba.

—¡Sandy! ¿Quieres almorzar juntos?— Corrio hacia el con una gran sonrisa amigable en el rostro, sin otras intenciones.

—Uh,, No lo se, realmente no- —Sin poder terminar de hablar, fue jalado hacia su mesa, era como si no tuviera voz ni voto.

Bastante molesto se sentó lo mas alejado del menor posible y abrió su libreta, comenzando a escribir mientras que comías.

—Oye, siempre llevas esa libreta a todos lados, ¿que es lo que escribes?—Intentó asomarse para ver que era lo que habia en las páginas, sin éxito, pues el pelimorado lo tapó con sus brazos.

—No es de tu incumbencia— Cubrió su cuaderno hasta que el contrario se rindió y siguió con su comida.

Suspiró cansado, realmente era molesto, muy molesto, no soportaba estar cerca suyo, comenzó a escribir aún con más rabia.

“Lo odio, realmente lo odio, lo odio con mi alma.
Odio como finge ser amable con todo el mundo.
Odio como me mira con esas sonrisas tontas, me hace sentir como si el realmente fuera una buena persona.
Estoy harto de el”

Se detuvo un momento a mirarlo, se veía como una criatura ajena a todo lo malo del mundo, se veía inocente..

“¿Por que demonios te ves como si fueras alguien puro?
¿Es esa tu manera de engañar a la gente para que confie en ti?
Esta claro que si mostraras tu verdadera personalidad ya nadie te querría
¿Que hay bajo esa fachada de chico bueno?”

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Pasando el tiempo y sin darse cuenta, el pelimorado fue cada vez prestandole más atención al castaño, notando pequeños detalles de el y haciéndose más cercano. Comenzó a tomar en cuenta sus opiniones, y a sentirse cómodo junto a el.

Cuando antes escribía cosas malas sobre el, ahora hacia pequeños poemas sobre las cosas buenas que destacaban, a escribir sobre lo agradable que era y cuanto disfrutaba estar a su lado.

Inconscientemente, empezó a mirarlo más de lo usual, a ponerse nervioso cuando estaba demasiado cerca y antes de que se diera cuenta, había caído completamente por el.

—¿En serio nunca me dejarás saber que es lo que tanto escribes?—Leon se acercó a el, de nuevo intentando lograr ver algo del contenido de su cuaderno.

—Ya te dije que no! Deja de molestar—Lo empujó lo suficientemente suave para alejarlo pero con cuidado de no dañarlo.

—Hey! Sand, necesito que vengas conmigo—La pelimorada se acercó hacia ellos bastante apurada, jalando del brazo de su hermano mayor para que lo siguiera.

—Dios, dios, ya! ¿Que sucede?— Cerró su libreta rápidamente y se alejó del castaño junto a la menor, sin despedirse del otro.