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Observaba desde lejos como el pelimorado lanzaba en balón al otro lado de la red con un ante brazo -voley-.

—¿No puedes disimular?— habló Andrés en su costado.

—No...es demasiado hermoso— balbuceó, el menor frunció el ceño al escuchar estás palabras.

Sin previo aviso golpeó la nuca del de orbes esmeralda.

—¡Hey!, ¿Que te pasa?— preguntó con molestia.

—Jodete, Víctor— respondió mientras se alejaba del mayor.

—Que raro...— susurró mientras miraba rápidamente su Whatsapp.

Mayito:
No te conozco pero siento que te amo :3.

Sonrío inconscientemente olvidándose del golpe de su amigo.

INCÓGNITO © MayictorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora