La Salida

Agonía De La Duda

Dudo, dudo de mi, de mis decisiones de mis sentimientos de los cuales el único que tengo claro es el de agonía, el de la baja autoestima el de no querer verme al espejo. Que aunque llegan palabras de ánimo suenan vacías. No quiero sentir que estorbo, que no soy nadie, otra vez ese sentimiento de no encajar, de ser invisible de querer echar a correr y sumergirme en mis sueños, de querer dejar de estar siempre por los suelos. No lo entiendo, porque siempre ando en nubes de algodón cuando dudo y caigo en un instante, ¿por qué imaginarse lo peor en un segundo, ¿por qué romper las esperanzas una misma? y es que vienen golpes de realidad que azotan con honestidad el que no será, nunca, que te recuerda lo que nunca fue bien, te echa atrás y con esos recuerdos vuelves a saber que nunca eres tú y te encierras en ese ciclo del ser y no ser cuando la respuesta a esta cuestión no está en tu mano.
Me siento tan pequeña, siento tanta presión, me gustaría quedarme aquí en mi rincón sin tener que demostrar que estoy ahí para saber que sigo viva. Con la constante sensación de que estoy molestando, de que no encajo, de que estoy etiquetada desde hace rato, rota y sin rumbo. Necesito calma, necesito cambio.