𝑬𝒍 𝒅𝒆𝒔𝒆𝒐 𝒅𝒆 𝒂𝒎𝒂𝒓 [Minsung]

capítulo 22

"Lo más valiente que he hecho fue continuar con vida cuando deseaba morir en el momento en que Hannie murió"- pensó mientras estaba hecho bolita en una esquina de la cama viendo hacia afuera por el enorme ventanal del departamento. Era medio dia todavía.

-Supongo que el pasado no puede ser modificado...pero si fuese así, creo que no te dejaría ir jamás de mi lado...- murmuró apretando sus pies con los brazos, metiendo su cabeza entre sus rodillas.

El alfa habia llenado completamente la habitación de hotel con aroma a tristeza, su aroma característico no estaba. Parecia que Minho no podia seguir más con eso, han pasado dos años y un poco más, sin embargo el pensamiento de aquel omega seguia latente como el primer dia.

Quería rendirse, no queria o más bien ya no podia seguir con aquel sufrimiento de no tener al omega a su lado, sentia su vida vacía, sin sentido. Todo parecía solo simples cosas cotidianas en almas vacías.

Jisung no volverá de la muerte, y quizás lo único que lo acercará al omega sea morir.

-Se que...-respiró profundamente y al sacar el aire retenido, un jadeo acompañado de una lágrima, salió.- se que no hubieses querido esto...se que jamás me perdonarias si atento contra mi vida- otra lágrima salió -pero ¿mi vida sigue siendo vida...sin ti?-

Su mirada permanecia perdida en un lugar de la habitación.

-Nisiquiera pude demostrarte lo mucho que me gustabas...no pasamos los momentos suficientes para crear hermosos recuerdos y que tu muerte no doliera tanto...-

Todo, todo lo que decia salia de su corazón, el nudo en la garganta le impedia hablar sin jadear. El sentimiento de culpa por el abandono hacia el omega cuando más lo necesito, era lo que lo mortificaba.

Quería morir. Lo deseaba, pero...ahí afuera sabía que habian personas que lo extrañarían. Pero...¿acaso él no lleva extrañando casi tres años a Jisung?.

Empezó a creer que se estaba volviendo loco, durante el tiempo que a estado brindando clases, extrañamente hay alguien en todas esas instalaciones, una persona que posee exactamente el aroma de Jisung, fresas con chocolate. Qué a pesar de ser un aroma bastante empalagoso, a él lo volvía loco. Pero, jamás fue capaz de ir tras esa persona y averiguar más.

Simplemente sabia que solo era su mente, sabia que seria imposible que el omega estuviese ahí, pues Jisung estaba muerto.

El alfa se levantó de la cama, sus ojos ya estaba rojos por retener las lágrimas llenas de dolor que gritaban en su interior por salir.

Ya no queria llorar, ya no queria sufrir. Queria morir.

Sacó de su armario una soga, ¿que hacia una soga en su armario?. Sabia que algún día la necesitaría nada más.

Permanecio parado viendo la soga en sus manos. ¿Estaba bien lo que haría?.

No lo hagas, lucha por favor, lucha- le rogaba su lobo desde el interior, el lobo lloraba por dentro, rasgando con mucho dolor el ser de Minho.

-Ya no puedo...- jadeo dolido.

Jisung no hubiese querido jamás est...-

-¡Él no esta aqui! ¡Entiendelo!-

Minho apretó más fuerte la soga en sus manos, permitiendose llorar en silencio.

¡Si lo esta, puedo sentirlo!- le reprochó su alfa.

Minho abrió los ojos lentamente, estaba enojado.

-Callate...callate...¡Callate!-

No queria seguir escuchando las estupideces que decia su lobo interior.

Vio hacia el ventilados apagado en medio de la habitación. Suspiró decidido.

Trago hondo, jaló una pequeña silla sin respaldar hasta estar en medio del ventilador. Se subió a ella y comenzó a atar la cuerda.

¡Se que él sigue vivo, créeme, puedo sentirlo de alguna manera!- su lobo lloraba, aullaba por dentro, sentia que el omega de Jisung seguia con vida, y si era así, el humano seguia con vida.

Eran destinados después de todo, podia sentirlo. Pero no estaba seguro.

-Callate por favor, callate-

Comenzó a llorar sin control callendo se la silla, pegando fuerte sus rodillas al piso. Jadeo al caer tan fuerte.

Pero su llanto era del dolor de su alma.

-Si estuviese vivo...¿por que no hablarme? ¡¿Ah?!- comenzó a discutir con su lobo -¡¿si estuviese vivo por que fingir su muerte?!- su lobo calló- ¡Explícame!-

Minho rió nasalmente, sonriendo de lado, todo esto parecía tan irónico.

-Sabia que no tendrías argumento para asegurar la estupidez que dices.

Sus rodillas estaban sangrando por la caída, pues se habia raspado bastante.

Al ponerse de pie, un pinchanzo en su corazón lo hizo retorcerse y tomar con su mano su pecho. Su corazón estaba muriendo y su cuerpo lo estaba demostrando.

Caminó hasta su mesa de noche, saco una cuchilla pequeña pero muy filosa. Volvió a subirse a la silla, puso la soga en su cuello.

Lágrimas comenzaban a salir, pero solo lloraba en silencio, no jadeaba, no hacia ni un solo sonido. Solo dejaba salir toda su tristeza. Quizas en la otra vida sea feliz y pueda encontrar a Jisung ahí.

Sonrió mostrando su hermosa dentadura al imaginar que al morir podría encontrarse con Jisung y por fin vivir esa hermosa historia de amor que tanto deseaba vivir.

Sus ojos eran rojos, sus mejillas tenían un color carmesí al igual que su nariz.

Vio la cuchilla, cerro fuertemente los ojos, apretando la mandibula.

Con una rapidez impresionante cortó su muñeca izquierda y la sangre no se hizo esperar más, el dolor era impresionante. Pero eso no lo detuvo para cortar su otra muñeca igual de rápido.

Fluidos salian de sus muñecas, un charco de sangre bajo sus pies a montones.

Sonrió tan feliz, una sonrisa que solo se habia hecho presente cuando conoció a Jisung.

Con su pie tiró la silla, haciendo que la soga se cerrara en su cuello.

El lobo de Minho dejo de respirar.

Al igual que Minho.

Si vivir era estar muerto. Entonces morir sería estar vivo.- con ese pensamiento en mente. Minho dejo de respirar.

🤍
Se que dije que esta historia tendría un final feliz y asi jabqia, pero la verdad no se como hacer esos finales felices jajajaj. Perdón 😈