- CLASES DE AYUDA -

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NARRA TN

Después del incidente de mi cuaderno, hace una semana, no me había vuelto a acercar a Tom, solo en las clases por las tardes para ayudarle. Al principio no quiso, pero vio que el director pasaba siempre por ahí para ver si cumplíamos lo acordado. 

Como no hice nada en respuesta a lo del cuaderno, Tom se daba por ganador de nuestra "guerra" y me lo restregaba todas las tardes. Lo que él no pensaba es que estaba planeando algo peor todavía de lo que había hecho. 

Tom cumplió, casualmente, los años tres días después de que hiciera eso. Sus padres le regalaron un buen coche, que no dudaba en presumir yendo con él al instituto (imbécil). Junto con Esther y Adrián lo planeé todo. Hicimos que aparcara el coche en un lugar sin cámaras delante, compramos las herramientas que íbamos a utilizar y espiamos los movimientos de Tom durante una semana.

Adrián: Esto va a ser increíble -decía Adrián a las 8.30 de la mañana en el aparcamiento del instituto.

Mientras que Esther y Adrián se aseguraban que no veía nadie, saco los sprays que compramos y empiezo a pintar el coche de Tom. Cuando termino, me alejo y lo admiro, pero siento que falta algo.

Tn: Adrián, pásame la navaja.

Adrián: No jodas Tn -empieza a reírse más todavía, saca la navaja que lleva siempre encima y me la da.

Esther: No creo que sea una buena idea.

Tn: Si hacemos algo, lo hacemos bien -digo mientras me acerco al coche para rayarle la palabra "GILIPOLLAS" en el capó-. Ahora sí que está bien.

NARRA TOM

El día en el instituto se pasó lento, desde que Tn ya no trata de hacerme la vida imposible se ha vuelto bastante más aburrido, podría decirse que ¿la hecho de menos? No no no no puede ser, es prácticamente imposible. Solo he estado con ella por las tardes en las clases de ayuda, en las que rogaba por que hiciera cualquier tipo de comentario o acto que hiciera estallar una respuesta por mi parte, pero absolutamente nada, se limitaba a ayudarme y ya. Paralelamente, el estar con Juan, su novia Camila y Elisa se me hacía cada vez más pesado, pero supongo que serán rachas. 

De vuelta a coger mi fabuloso coche nuevo, con Elisa agarrada de la cintura y Juan y Camila delante de nosotros, veo como hay un corro de personas alrededor de él, lo que me desconcierta, es decir, era nuevo, pero ya lo habían visto antes. Me acerco mejor para ver que ocurre, cuando veo de lo que se trata, me quedo paralizado.

Juan: Pero ¿qué cojones? -dice detrás mía.

Tom: ¿Quién coño ha sido? -la ira se había apoderado de mi- juro que lo mataré.

Me echo las manos a la cabeza, dirigiendo para atrás todo mi pelo. En esto escucho unas carcajadas que no oía desde hace mucho a pocos metros, no puede ser. Me giro para comprobar que era ella, sí lo es.

Tn: Madre mía Tom -dice riéndose- parece que te han mejorado el coche ¿no?

Tom: ¿Has sido tú? -pregunto sabiendo las respuesta.

Tn: ¿Yo? ¿Cómo puedes pensar eso de mí? -dice irónicamente acercándose lentamente al coche, quedando en frente de él- Creo que hubiera estado mejor aplastarlo -dice girándose y mirándome a los ojos, como no hacía desde hace tanto.

ENEMIES TO LOVERSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora