¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Una fuerte tormenta se avecinaba en aquel pequeño pueblo alejado de la ciudad, el cielo gris y el sonido de los relámpagos había alertado a todos, a todos menos a Yoongi, quien con la cabeza en otro lado deseaba escapar lo más rápido posible de aquel lugar al que le llamaba casa.
No supo cuándo las gotas de agua sobre su cabeza no le importaron, por un momento incluso la canción de "The Strokes" que retumbaba en sus auriculares pasó a segundo plano convirtiéndose en un mero murmullo, se quedó quieto en la calle, estancado en una palabra que merodeaba sus más íntimos pensamientos.
"Hogar."
¿A caso existía eso?
La pregunta existencial fue interrumpida cuando la bocina de un auto rompió con esa burbuja extraña en la que se había metido, en el medio de la calle un loco de remate se había agachado a buscar algo.
Yoongi reaccionó rápidamente al ver que se trataba de Jimin, quien a penas se levantó fue empujado hacia el otro lado de la calle por el pálido, que no perdió tiempo en insultar al conductor por no frenar en lugar de tocar su bocina.
-Idiota, que esté apurado no es nuestro maldito problema.
Soltó molesto, Jimin miraba al suelo bastante avergonzado por haberle causado problemas a Yoongi, creyó que se ganaría un insulto de parte del mayor, pero estaba bastante equivocado.
-¿Estás bien?-preguntó Yoongi acercándose al menor y buscando algún tipo de herida en su pequeño cuerpo.
-Y-yo, tranquilo. Estoy bien.-respondió Jimin con una pequeña sonrisa vergonzosa, sujetaba con fuerza algo en sus brazos.
-¿Qué tienes?
Jimin volvió a bajar la mirada ante la pregunta, creyó que a Yoongi le parecería una tontería, de nuevo se estaba equivocando, lo supo cuando finalmente corrió su abrigo y le mostró al mayor aquello que sujetaba con tanta fuerza.
Yoongi se sorprendió al ver un pequeño gatito negro entre los brazos de Jimin, quien no paraba de disculparse con él. Sonrió y acarició al gatito asustado y algo empapado por la lluvia, ambos se miraron de arriba hacia abajo, estaban completamente mojados de pies a cabeza por la lluvia, pero extrañamente no les importaba.
-Entonces, ¿no estás molesto?
-¿Molesto? no. ¿Preocupado? tal vez.
-Bueno yo...supongo que fué arriesgado.
-Lo fué, podrías haber resultado herido.
-Lo sé, ¿pero no crees que al menos tengo más posibilidades de sobrevivir que él?-Dijo señalando al pequeño gatito dormido entre sus brazos.
La pregunta descolocó a Yoongi al punto de no poder responder. Recordó el día que había conocido a Jimin, también el día que lo había visto por primera vez, entendió que quizás él tenía una manera de ver la vida demasiado pobre comparada a la del menor.
