POV DE CAMILA
Busqué a ciegas siguiendo el sonido y miré quién podía llamarme en este momento. En la pantalla, se mostró el nombre de Dinah. Me llamó por Facetime pero no tuve fuerzas para hablarle ahora, la llamo luego. Me volví hacia la persona que dormía plácidamente a mi lado. Lauren con sus ojos esmeralda, su nariz dominante y sus labios carnosos. La única vez que no da la vibra de "Papá" sino la de un bebé es cuando duerme.
Estaba recordando hechos que habían sucedido ayer. Fue uno de los días más hermosos de mi vida, todos estaban allí y todos felices. Deslicé mi mano en la de Lauren y admiré lo bien que encajaban. Nuestros dos anillos que brillaban y cuyos nombres estaban grabados me dieron mariposas en el estómago. No puedo creer que ahora soy la Sra. Camila Jauregui, para ser honesta, voy a extrañar mi antiguo nombre, pero usar el nombre de Lauren me da vértigo.
Nunca olvidaré como me hizo el amor anoche, ya no era solo sexo sino algo más profundo. Podía sentirlo a través de sus besos, caricias y malditos ojos que podrían derretirme en cualquier momento. Eché un vistazo al reloj moderno encima de la televisión, ahora eran las 10 am y decidí ir a hacer el desayuno porque hoy el día nos esperaba hoy ya que Lauren había planeado mostrarme los alrededores. Me levanté de la cama y me puse el albornoz de seda rosa que colgaba del tirador del armario. Miré por última vez a la gran bebé que dormía en la cama, le salía baba por la boca.
'Tal vez debería tomar una foto.'
Tomé mi teléfono y apunté a la cámara, haciendo zoom en su rostro, puse mi mano frente a mi boca para evitar hacer ruido. Tomé la foto y la miré de inmediato. Me estaba ahogando de la risa y tenía lágrimas, como si fuera hora de cambiar mi fondo de pantalla. Estaba de humor para hacer panqueques esta mañana.
Empecé mezclando harina, azúcar, levadura y huevos. Puse mi lista de reproducción en mi teléfono porque lo hizo más divertido y me encanta bailar mientras cocino. Todavía estaba pensando si debería hacer panqueques con tocino o panqueques con frutas, pero como Lauren prefirió el primero, se lo haré. Estaba bailando Quiero bailar con alguien de Whitney Houston moviendo las caderas con la canción mientras cocinaba los panqueques.
¡Vaya! Quiero bailar con alguien Quiero sentir el calor con alguien ¡Sí! Quiero bailar con alguien con alguien que me ame.
Estaba tan metida en mi música que no me di cuenta de que cierta persona me miraba por un tiempo hasta que me di la vuelta con el plato de panqueques y casi los dejo caer.
"Dios, ¿eres un fantasma?" se rió de todo corazón, cómo desearía poder escuchar esa risa por el resto de mi vida. Se acercó a mí colocando sus manos detrás de mi espalda y me empujó para que nuestros cuerpos se aplastaran uno contra el otro.
"Un fantasma travieso así". dice, moviendo las cejas. Maldita sea, olía a menta, mi favorito,
"¿Ningún beso matutino?", ella hizo un puchero. Como dije, ella es realmente un bebé grande. Me apoyé en ella y besé sus labios, pero estaba lista para besarme de nuevo cuando la detuve colocando un dedo sobre ella.
"¡No, vamos a comer, cariño! Tengo hambre". La tomé de la mano y la acerqué a la mesa. Era una mesa de madera lijada que iba a la perfección con la decoración de la casa. Solo ahora me doy cuenta de cómo se ve la casa. Como le pregunté a Lauren, no me gustaba cuando había demasiados muebles porque eran pesados y porque me gusta vivir en un espacio donde me siento libre.
"¿Te gusta?"
"¿Qué?"
"¿La casa?"
"Sí, es perfecto cariño. Es como la casa de mis sueños". Me gustó mucho, era lo que siempre imaginé. El jardín no era ni muy pequeño ni muy grande, espero poder disfrutar viendo a mis hijos correr y divertirse. Estaba con la cabeza en las nubes cuando sentí sus manos sobre las mías mientras acariciaba el anillo que llevaba puesto.
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SUGAR DADDY (CAMREN GIP)
FanfictionCamila Cabello, estudiante de derecho, lucha todos los días para mantenerse. A diferencia de otros jóvenes de su edad, ella nunca sale a clubes, por lo que debe hasta la mañana. En cambio cuando conoció a la CEO Lauren Jauregui y le ofreció algo mas...