Habían estado oficialmente juntos por un mes, pero para Yeosang se sentia como un año. En el buen sentido, claro. Siempre le decía 'Te amo' antes de colgar o cuando se separaban después de un dia de estar juntos, antes de ir a casa. Y Seonghwa no decia nada, excepto sonreir y besarlo, pero eso era suficiente para Yeosang porque lo único que queria era que el mayor fuera feliz y se sintiera amado. Y Yeosang sabia que Seonghwa tenía ambas cosas, por lo que estaba feliz. Pero sabia que Seonghwa realmente se preocupaba por él, tal vez incluso lo amaba, porque hace tres semanas para el día de los inocentes le dijo que quería que rompieran y Seonghwa casi lloró.
Se encontraba en una tienda de Rolex con Mingi, tratando de decidir qué reloj darle a Seonghwa por su primer mes aniversario, el día de mañana. El sabia que el castaño odiaba el hecho de que Yeosang siguiera gastando cantidades ridículas de dinero en él, pero a Yeosang le encantaba. Queria consentir a Seonghwa, a pesar de que era dos años mayor que el.
Sus padres habian superado la fase de Yeji y la ruptura y ahora estaban de vuelta a la normalidad; su madre todavía no sabía nada del engaño de su padre, pero Yeosang estaba planeando decirle finalmente. Su familia se iba mañana a visitar a sus abuelos en Australia y Yeosang salió de eso diciendo que tenía que estudiar para los exámenes dentro de un mes. (Él no estaba realmente pensando en estudiar ese sábado, iba a invitar a Seonghwa a su casa.)
— ¿Qué tal este? — Mingi sugirió, evidentemente molesto por el hecho de que habían pasado casi una hora en la tienda tratando de encontrar el reloj perfecto que coincidiera con el gusto de Yeosang — ¡Mira! ¡También puede configurar alarmas diarias! — Mingi intentó y Yeosang se volvió a mirar el reloj de oro que Mingi estaba señalando. — Y tiene también en plata que puedes darle a Seonghwa a juego.
Yeosang miró el precio, Costaba sólo cuatro mil dolares.
— Compraré estos dos — le dijo al hombre detrás del mostrador, que había intentado venderle diferentes modelos. — Y programelos para que la alarma se active cada mes en el día veintidós.
El hombre asintió con la cabeza y comenzó a trabajar en ellos mientras Yeosang sacaba su tarjeta de crédito. Si sus padres preguntaran por qué compró dos relojes similares, él les diria que no podia decidirse por uno.
— ¿Qué estás planeando hacer mañana?
— Lo invitaré y probablemente vamos a pedir una pizza y tener sexo, es fácil de complacer— Yeosang le dijo.
Mingi asintió y se sacó de onda, probablemente pensando en lo que Hongjoong y el hicieron en su primer aniversario de mes. Habían estado en una relación por más de cuatro meses y Yeosang podía ver que eran muy felices juntos. También sabía que Mingi estaba pensando en pedirle a Hongjoong vivir con él una vez que el verano terminara, cuando fueran a la Uni. Mingi asistiría a Oxford con Yeosang y Hongjoong a la Universidad de Las Artes también en Londres.
Estaban a una hora de distancia el uno del otro pero ya encontrarían una manera de resolverlo. Sabía que era probablemente demasiado pronto para pensar en ello, ya que sólo habían estado saliendo desde hace un mes, pero Yeosang también quería preguntarle a Seonghwa para conseguir un apartamento con él (si Seonghwa entraba en una Universidad de Londres) Tendrían el mismo problema que Mingi y Hongjoong, sin embargo. Después de que pagó por los relojes, el hombre los envolvió y se los entregó.
— Gracias —dijo.
— Finalmente — Mingi gimió mientras caminaban fuera de la tienda, entrando en un bulevar.
Era uno de los pocos viernes que San no estaba dando una fiesta, así que los dos decidieron que debian ir a ver una película, y tal vez hacer algunas compras de antemano. Si, la vida de Yeosang no podría haber ido mejor ahora que estaba a punto de graduarse y teniendo un novio que amaba.
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Bebé, el cielo está en tus ojos (𝙨𝙚𝙤𝙣𝙜𝙨𝙖𝙣𝙜) adaptación
FanfictionKang Yeosang tiene 17 años y está en su último año en la escuela más privada y prestigiosa de Seúl, él tiene grandes planes para su futuro y gracias al dinero de sus padres no tendrá ningún problema en alcanzarlos. Todo el mundo que asiste a su escu...