𝐒𝐀𝐕𝐄 ᴰʳᵉᵃᵐ ㅡ 𝙉𝘾𝙏 𝘿𝙍𝙀𝘼𝙈

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"Shhh"

Uno por uno, fueron tirandose con fuerza y ​​terminaron sentados en el suelo.

Completamente en silencio, sin el coraje de desobedecer la orden de los demás.

El sonido de los disparos se repitió una... dos... tres veces.

Ahora no era solo Jisung quien estaba asustado. Todos cerraron los ojos, en un acto involuntario de pavor.

Si bien mantener los ojos abiertos ahora no haría ninguna diferencia, el lugar estaba completamente oscuro.  A diferencia de todas las películas y libros, no tenían el lujo de una luna llena para iluminarlos.

No podían decir cuántos minutos pasaron en pura tensión, los oídos atentos al más mínimo susurro en los árboles.

"¿Qué fue eso?"  La voz susurrada llegó a todos los chicos y fue solo con el comienzo de la conversación que se dieron cuenta de que todos estaban muy cerca.

"¿Quizás personas que cortan árboles ilegalmente?"

"Probablemente"

"¿Ya se habrán ido?"

"Por favor hyung, quedémonos aquí un poco más"

Ellos cumplieron con la petición del maknae.

Esperaron lo que parecieron horas antes de decidir finalmente pasar la noche allí, en el suelo. Usarían los abrigos que habían tomado como cobijas y las mochilas como almohadas.

La comida, si se puede llamar así, fue silenciosa. Después de eso, se acostaron.

Rodaron de un lado a otro todo el tiempo, en una búsqueda inútil de una posición cómoda. Y Haechan ya estaba harto de la pesada atmósfera, que solo empeoraba con el viento que aullaba siniestramente a través de las copas de los árboles. El movimiento de las hojas lo puso en constante estado de alerta, parecían algo en movimiento.

Sorprendentemente, preferiría estar en un bosque real que allí. Los espacios vacíos entre los tallos estrechos lo estaban poniendo aún más ansioso. Como si fuera uno de esos juegos de terror que -probablemente nunca volvería a jugar- eran tan divertidos y de repente tendrían la figura de alguien parado frente a ellos mirándolos.

Como si eso no fuera suficiente, Renjun literalmente se levantó y cambió de lugar cuando se dio cuenta de que se había interpuesto entre Jaemin y Jeno durante el lío anterior.  Esto estaba volviendo locos a todos.  No parecía un problema que pudieran abordar y resolver como grupo, pero al mismo tiempo estaban atrapados en una situación en la que tampoco podían tener un tiempo de privacidad.

Cuando Chenle le dio un codazo accidentalmente, sintió que le salía una vena de la frente.

"¿Quieres dejar de moverte?" se quejo, indignado.

"Hyung..." por el tono del joven sabía que nada bueno vendría. "Quiero ir al baño, no podré dormir"

"Yo también, yo también" dijo Park a continuación.

Donghyuck se pasó las manos por la frente con exasperación. Él también estaba tenso, pero se negaba a admitirlo.

"Está bien. Pero no aquí cerca de donde vamos a dormir" – se sentó en el suelo "¿Alguien más quiere ir al baño?"

"No" La voz baja y distraída de Renjun sonó a su lado. El mayor observaba la velocidad de las nubes atravesando las estrellas en el cielo. Era incómodo y silencioso.

Pronto la pareja que estaba en el lado opuesto del chino también habló diciendo que estaban bien.

"Comportense" dijo Haechan en un tono de fingida diversión. De hecho, tenía mucho miedo de que algo sucediera allí. "Dejaré una linterna encendida aquí para que podamos regresar"

La idea pareció alarmar a los tres, quienes tomaron asiento. Ellos asintieron brevemente.

"No vayam muy lejos. Y vuelvan pronto"- dijo Jaemin temeroso, recibiendo un 'ok' del moreno antes de verlo desaparecer rápidamente de la luz con los dos más jóvenes.

Na respiró hondo, ansioso. Su novio notó su malestar y pronto unió sus manos.

"Regresarán pronto, Nana" dijo cariñosamente y luego miró al chino que estaba un poco más lejos "Injunni, ¿Quieres acercarte más?"

Renjun miró a Jeno con una mezcla de lástima y disgusto. Estaba nervioso y el pobre no sabía ni lo que había pasado.

"No, gracias. Puedes continuar con tus cosas de noviazgo"

La palabras pronunciadas fueron como el clímax para Jaemin. El más joven se levantó, casi fuera de sí.

"¿¡Cuál es tu problema!?" preguntó demasiado alto, sorprendiendo a los otros dos chicos. Huang tragó, pero su ira era más fuerte.

Chasqueó la lengua con desdén antes de responder "Ninguno" sarcásticamente.

"¡Deja de comportarte así!" El tono era de puro dolor y la forma en que el menor vaciló en dar un paso hacia adelante llamó la atención de ambos nuevamente "¡Dime! ¿Cuál es el problema, Renjun? ¿Acaso es un maldito problema que me guste Jeno?"

El chino estaba atónito, completamente atónito por la pregunta. No era lo que esperaba.

Un silencio de muerte pesaba sobre los tres.

Incluso al ver la expresión de dolor en su hermoso rostro, los mayores se sorprendierom cuando Jaemin dijo ahogado, con lágrimas humedeciendo sus mejillas: "No, yo... sé que acordamos que los tres-, lo siento, fue involuntario. Es solo que estabas tan... ahí-yo..."

Se pasó las manos por el pelo, como un niño perdido. Estaba perdido.

"Nana..." llamó Jeno en voz baja y se acercó a él, tomando las manos del menor entre las suyas como si fueran lo más preciado del mundo.

Jaemin miró primero a su novio, luego respiró hondo y dirigió su mirada a Renjun, quien permanecía completamente inmóvil en su lugar.  Pronunció en tono herido: "Si no te agrada, lo entiendo. Lo entiendo. ¡Pero no tienes que mirarme como si fuera la peor persona del mundo! ¡No es algo que yo elegí! Es-¡No es justo que me trates así!"

El más joven comenzó a sollozar, haciendo al mayor suspirar y cerró los ojos con fuerza, tratando de contener las lágrimas.

Jeno lo atrajo rápidamente a sus brazos, apoyándolo en esa fortaleza de afecto y comprensión.

Por encima del hombro de su novio, miró seriamente a Huang, que seguía de pie como una estatua. "¿Es por eso que estas raro con nosotros?" Sin respuesta. "¿¡Renjun!?"

Con su nombre siendo llamado, el chino finalmente comenzó a parpadear frenéticamente. Su boca se abrió y cerró varias veces, sin voz.

"N-N-Yo no... Jaemin... Jeno... Yo..." El pequeño se levantó del suelo, dando un paso hacia la pareja.

Pero su dificultad para hablar se interrumpió cuando Na se separó del abrazo. La imagen de sus ojitos hinchados y los labios temblorosos fue un martirio. "No es necesario que finjas lastima, no te lo estoy pidiendo. ¡Solo quiero que dejes de mirarme como si fuera un ser humano horrible!"

"No... no, Nana perdóname, Dios mío perdóname" sollozó el mayor con fuerza y ​​sintió temblar todo su cuerpo. Su corazón dio vueltas dolorosas "Lo entendí todo mal... todo mal... yo..."

"Déjalo" dijo Jaemin, alejándose y frotándose los ojos con las manos.

"¡No, por favor! Nana, escúchame" Cuando el chino iba a dar un paso adelante, tropezó con el celular que estaba colocado de manera estratégica, haciendo que la linterna se apagará.

"¡Mierda!" Jeno y Renjun maldijeron, buscando rápidamente a dónde había ido el dispositivo que había sido pateado.

"¡Encuentrenlo! ¡Los chicos necesitan esto para encontrarnos!" rogó Jaemin, cansado y angustiado

"¡Tranquilo!" Huang, que parecía tan decidido hace unos segundos, ahora estaba con los nervios de punta "¡Qué carajo! ¡No lo encuentro!"