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Después de que mi madre me soltara la bomba, ella se fue ya que Onna no podía sola.

Me encontraba en Shock.

¿Como es posible? Soy una abominación.

Dios mio soy el desequilibrio de la naturaleza ¿Que pensara Madre Lori?

Me siento destrozada y no entiendo el porqué.

Me gire un poco para el lado y sentí como lágrimas caían de mis ojos y mi pulso acelero un poco y el pitido cada vez era más molesto asique desenchufe la máquina y me permiti llorar un buen rato.

¿Que estaba pasando conmigo?

¿No fue suficiente aquello que paso?

🙈

Estaba firmando el alta, ahora mismo me apetece darme un chapuzon a lo grande asique estoy firmando lo más rápido que puedo para irme.

—Y listo, Señorita Swan Davis ya puede irse.— Dijo el Doc.Quileute y yo sonrei a lo grande para despedirme de el con la mano y salir de allí a una velocidad increíble.

Una vez ya montanda en mi coche conduci hasta la Push, ya que Issa me había dicho si miraba bien habían acantilados mucho más grandes asique yo como buena fan de la adrenalina estoy ahora mismo frente a un acantilado de como uno ¿150 metros? No se pero estaba alto.

Me quite la camiseta luego el pantalón y por último los zapatos.

Coji carrerilla y mire para los lados por si había alguien y no, solo habían unos cuantos chicos muy lejos en otro acantilado mucho más bajo y lejos de aqui.

No lo pensé más y me tire y cai como siempre, perfecta.

NARRADOR: PAUL LAHOTE.

Mierda.

Es flipante como el puto no quiere que yo sea feliz.

¿QUE COÑO LE HABIA PASADO A MI PRECIOSA IMPRONTA?

Unas horas antes.

Mi teléfono sonaba como loco hace rato pero como esta trabajando en el taller pues mira no me salía de los huevos cogerlo, pero al final lo cogí.

—¿Si?

—¡PAUL TIENES QUE VENIR PARA ACA!

—¿Jake que dices?

—¡ELLA ESTA MAL!

—¡VAMOS A VER JACOBO DE MIERDA QUE COÑO DICES DE QUIEN COÑO HABLAS!

—¡MIERDA PAUL, ADHARA ESTA MAL ESTOY AHORA MISMO CON ELLA, BELLA DICE QUE HA VOMITADO MUCHISIMO Y QUE NO SE QUE DEL CAMINO, MIERDA PAUL VEN YA AL PUTO HOSPITAL!—

No termino de hablar cuando yo ya estaba corriendo a cuatro patas aullando con dolor. Mi impronta estaba mal y yo pasando de todos.

Porque coño los ancestros no me dejan ser feliz.

Ya en el presente.

Sam me ha tenido que sacar del centro porque agredi a ocho enfermeros. Nadie le ponía una mano encima a mi princesa.

—Sam dejame pasar ya.— Dije con los mismos modales de siempre, yo no le iba a suplicar a nadie y a quien no le guste que se joda.

—Te he dicho que no Paul, hazme caso.— Dijo el con su voz de macho Alpha.

—Es mi impronta ¿Que pasaría si no fuera ella, si ella fuera Emely? Las cosas cabian verdad.— Dije yo fastidiado y el se quedo mirandome fijamente por un buen rato.

Hasta que asintio y suspiro.

—Entra antes de que me arrepienta.—Cuando escuche a mi Alpha decir eso mi lobo aullo de felicidad. Camine con prisa hacia el centro y una vez allí entre a la habitación pero lo que me encontré me dejo de piedra.

—¿Joven Lahote, que le trae por aquí?— Me pregunto una de las enfermeras que estaba cambiando las sabanas de la cama y yo entre en pánico.

Me acerque a ella y le cogí de los hombros llegandola a asustar.

—¿Donde esta ella? ¿DONDE ESTA ADHARA? ¿¡DONDE COJONES ESTA!?— Empece a gritar y ella se asusto más no me dejo con la intriga y me respondió.

—¡Le dieron el alta hace unos cuantos minutos lo juro, hará media hora!— Me respondió asustada y yo la solté. Le mire y ella empezó a llorar le pedí una disculpa serio y me fui de ahí.

Tu para mi.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora