Song Shots- Hypnosis Mic

It's you - Saburo Yamada

—¡Saburo!— ante el llamado, volteé a todos lados buscándola. Habíamos quedado de vernos aquí y poder llegar juntos al cine. Caminar por ella era muy relajante para mí. Su sola presencia me hacía feliz. —¡Llegué!— dijo saltando hasta mi.

—Si, ya vi.— rió.

¿¡Por qué su risa tiene que ser tan estúpidamente linda?!

¡Saburo! ¡Deja de decir esas cosas! ¡Suenas a un estúpido enamorado!

—Oh, mira— ella señaló hacia el lado contrario, así que volteé a ver.

—¿Qué?— pregunté, y antes de regresar mi vista a ella, sentí una presión suave en mi mejilla.

—Ya pasó.— dijo riendo —Andando~— y comenzó a caminar.

Mi corazón estaba latiendo a mil por hora, las manos comenzaban a sumarme y sentía mis mejillas calentarse.

Ella volteó a verme. ¡No! ¡Que ridículo me he de ver!

—Oye, Saburo, ¿vamos? La función va a empezar.

—S-si... ya voy...— dije comenzando a caminar, adelantándome a ella, para que así, no pudiera ver el horrible sonrojo que había aparecido en mis mejillas.

Todo habría salido aún más perfecto si ella no hubiera tomado mi brazo para poder caminar a mi lado.

—Maldita sea...

—¿Qué?

—Nada... hum... ¿vas a querer palomitas o algo?

—Si. ¿Y tu?

—Pues... supongo qur... p-podriamos compartir unas, ¿no?

—Por mi no hay problema— respondió volviendo a reír.

¿¡De cuando a acá se ha vuelto tan risueña?! O aún más importante, ¿por qué me hace sentir así?

Llegamos al cine e hicimos todo lo necesario para entrar; compramos las entradas, palomitas... incluso un helado, ya teníamos todo.

Nos dirigimos a nuestra sala y nos sentamos comenzando a comer, en lo que los anuncios pasaban.

—Gracias por invitarme, Saburo.

—Yo no...— me aclaré la garganta —No es nada... gracias a ti por... por venir conmigo...— ella me sonrió, y eso solo provocó en mi grandes ganas de besarla, pero no haría tal tontería —Y... ¿p-por qué querías ver esta  película?

—¿Recuerdas a AMBIVALENZ?— asentí.

—Tú grupo favorito, si.— su rostro en ese momento se iluminó, sus ojos brillaban y la emoción se le notaba demasiado.

—Ellos... cantan el tema principal, por lo menos la mayoría de mis favoritos... es mi canción favorita.

—Oh, entiendo... bueno, entonces supongo que debe de ser muy genial como para que sea tu favorita.

—Es algo cursi, de hecho, pero me encanta. Espero no hacerte pasar un mal momento por que la película sea todo lo contrario a tus gustos...

—No, no hay problema. Te invité y dije que tu escogerías la película, ¿no es así? Voy a disfrutarla, o por lo menos tratar.

Las luces bajaron y entonces comenzó. Ella se acomodó en su lugar y fijó su atención en la pantalla, yo sólo podía mirarla a ella.

Aquella música comenzó y ella se emocionó; podría incluso jurar en que saltó en su asiento.

"En los días en que me enfrento a ella, estoy seguro; creo en la ilusión del momento de aquella voz que me llama"