Melancolía. -YeonGyu-

4. Stop Crying You Heart Out.

Antes de esto quiero pedirles que puedan escuchar esta canción, reproducirla en el momento donde aparece el 🎶 porfavor, por su atención gracias y que disfruten la lectura.♡

Lunes.

Cenaban después de entrenar un poco, Yeonjun compartía sus habituales pedazos de manzana, esta vez en formas de nubes, mientras que Beomgyu había optado por traer galletas de avena y barras de amaranto.

—Uh, entonces tendrás que viajar desde el seis de febrero, ¿no? Para llegar, instalarte y estar preparado para la ceremonia de inauguración.

Yeonjun asintió mientras masticaba un pedazo de galleta.—Sí, exactamente. La delegación viajará desde el tres de febrero, pero debido a una última documentación mía que me darán hasta el cuatro iré el seis.

Alzó las cejas sorprendido, preguntó intrigado.—¿Qué tan emocionado del uno al diez estás?

El pelirrubio rio nervioso.—Diez mil.

Sonrió de lado.—Lo imagino, después de todo es tu debut. Y en un deporte altamente competitivo si de olímpicos se trata.

Vió a Yeonjun recostarse sobre la colchoneta y suspirar pesadamente.—Apenas y puedo imaginar quedar en el top diez, los rusos, la academia italiana y sobre todo los estadounidenses. No, los chinos.—Tarareó un momento.—Aunque también ese chico japonés, Yuzuru. Ayer leí un artículo, decía que ha estado entrenando con uno de los mejores patinadores retirados del mundo, es probable que su presentación nos sorprenda.

Beomgyu ladeó la cabeza, pensando.—Tal vez, pero también eres bueno Yeonjun, quedaste en el puesto trece en el mundial.—Apretó su labio, avergonzado.—El otro día vi tu presentación, es muy buena. Sólo estabas nervioso, si hubieses logrado ese Triple Axel hubieses quedado en el top 10.

El pelirrubio exhaló una suave sonrisa.—Cielos, me siento absolutamente alagado.

Dejó un golpe en la pierna de Yeonjun, este se quejó.

—A lo que voy, ¿Supongo que la rutina que haz preparado para tu debut olímpico es similar? Si lo es, será muy buena. Y quien sabe, incluso puedas lograr una medalla.

Hubo un lapso de silencio, entonces el pelirrubió negó.

—No. Esta vez he preparado algo totalmente diferente, no es ni un poco similar a lo del mundial.

Beomgyu frunció el ceño.—No puedes decir eso, todo artista tiene un patrón en su trabajo, deberá haber algo similar.

Yeonjun asintió.—En la técnica, tal vez. Pero...—Tomó aire audiblemente.—Incluso, logré cambiar eso, es una técnica diferente, no es lo mismo que hasta ahora he presentado.

Miró el reloj, faltaba una hora antes que salieran, se supone que deberían ir a terminar de entrenar, pero estaba curioso.

—¿Cómo podrías lograr eso? Mhm.

Yeonjun se levantó, quedando sentado frente a sí, lo miró atento.

—El otro día que fuimos a patinar, ¿Qué fue lo que viste? ¿Cómo me percibiste al verme patinar?

El pelinegro frunció el ceño, recordando la silueta delgada de Yeonjun sobre el hielo la semana pasada. La respuesta fue rápida, tan definitiva. Miró a Yeonjun a los ojos.

—Bello, lucías Bello ahí. La Belleza relucía en todos tus movimientos.

El pelirrubio asintió con una sonrisa.—Sí, la belleza estética. No es eso lo que esta vez les mostraré.