Interés/Hankisa_Omegaverse

celo omega

Un día de clases normal para kisaki, hoy toca matemáticas una de sus materias favoritas, ¿Que de malo podría pasar en el maravilloso día que está teniendo hoy? Exacto que su celo se adelante ¿Y que es mucho peor que eso? Que esté en el medio del pasillo rodeado de gente ¿Y que es mucho, pero mucho peor? Claro, que no tenga supresores y como el director de la escuela es un Alfa de mierda que odia a los omegas no permite que den supresores en la enfermería, pero que mala suerte la del pobre omega. Como pudo corrió asta al baño y se encerró en el último cubículo, su pantalón al igual que su ropa interior están manchados del lubricante natural que produce, por suerte siempre carga una muda de ropa.

-Mierda porque me tiene que pasar esto ahh~ - sus pezones erectos rozaron con la camisa provocando el gemido. Desprendió su camisa, bajo sus pantalones junto a sus boxer y con cuidado introdujo dos dedo en su ano, imaginando que los largos y finos dedos de su alfa lo penetraban sin piedad- Shu-Shuji~ - gimió con la esperanza de que su alfa apareciera, de sus ojos ya salían lágrimas por lo excitado que se encontraba.

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Por otro lado Hanma se encontraba feliz yendo al salón de matemáticas en donde se supone que su Omega debería estar, para su sorpresa del salón salieron todos menos al que buscaba, eso le pareció raro, nunca se saltaba las clases y mucho menos las de matemáticas. Paso al salon para inspecionar si su Omega se quedó o algo por el estilo, al observarlo no había nada salvo por aquel rubio de ojos celestes que aún se encontraba guardando sus cosas.

-Oe Takemichi ¿Kisaki a venido a clases hoy? -se acercó hacia el Omega y se sentó en uno de los bancos.

-Mmm... A clases de matemáticas no vino, pero si lo ví en las otras clases y en el pasillo - hizo una pequeña pausa para pensar un poco más- Ahora que lo recuerdo cuando lo ví en el pasillo estaba medio raro.

-¿Raro como?

-Estaba muy sonrojado y sus piernas empesaron a temblar, iba a preguntarle si se encontraba bien pero salió corriendo.

-Gracias tontomichi - sin despedirse salió corriendo en busca de su amado, lo busco por todos los pasillos y salones, al no encontrarlo empezó a desesperarse y su olor agrio no tardó en aparecer. No iba a rendirse, se aproximó hacia los baños con intención de mojarse la cara para poder calmarse un poco, asta que un delicioso olor a durazno lo interrumpió, sonrió al saber que ese olor pertenece a su Omega. Con calma se acercó siguiendo aquel dulce olor, a medida que se acercaba suspiros y gemidos se empezaban a escuchar. Gracias a los gemidos más el fuerte aroma a durazno pudo comprender que su Omega había entrado en celo, con mucho cuidado golpeó la puerta del baño, hubo un pequeño silencio.

- ¿Eres tu Shuji~? - gimió el nombre del otro. El mayor quedo embobado al escucharlo.

-S-Si soy yo - se apuro en contestar provocando el tartamudeo- ¿Me dejarías pasar? Kisa~ - dijo pegando su oído a la puerta, se sonrojo al escuchar un gemido ahogado.

-S-Si - dijo desesperado por ver a su alfa. Pasos torpes se escucharon acompañados del ruido de la puerta siendo destrabada, Hanma sonrió al ver en la comprometedora pose en la que su Omega lo esperaba. Una de las manos del menor se encontraba apoyada en la pared mientras que la otra masturbaba su entrada, su boxer asta su rodillas y su pantalón tirado en el piso. El lobo interior del alfa lo estaba dominando, por más que intentaba controlarse no pudo evitar gruñir de forma violenta, eso provoco que el pequeño Omega se asuste y saque sus dedos de su interior para intentar cubrirse con la única prenda de ropa que traía puesta- Pe-Perdón, no se q-que hice mal pe-pero no lo volvere a ha-hacer - tartamudeo asustado, sus lágrimas no tardaron en salir.
Eso hizo que Shuji volviera a sus cinco sentidos, su corazón se partió al ver a su Kisaki de esa manera y más al saber que fue por su culpa.