Abrí un cofre del tesoro en el Olimpo

Capítulo 76 Calculo de Hermes

"Maldita sea, ¿cómo puede el dios madre acceder a casar a Afrodita con Apolo?"

Enorme en el palacio, Ares rugió indignado, su figura como un trueno.

"Así es, los dos hemos estado persiguiendo a Afrodita durante tantos años, pero no podemos conseguirlo, y al final, Apolo es conveniente, ¡muy lamentable!"

Hermes es también un lado bajo.
Los dos se miraron y suspiraron al mismo tiempo.

"Han pasado unos días desde que regresé, mi padre ni siquiera ha regresado al Olimpo, y ahora hay una leyenda subdivina milagrosa que aún se pierde, declarando que quiere establecer Apolo por el bien del nuevo Dios Rey." Hermes apretó los dientes y dijo.

"Estos líos, frente a nadie es respetuoso con el padre y la madre, ahora muestran sus verdaderos rostros, ¡quiero matarlos!"

Ares rugió y sacó su propia espada.
Hermes lo detuvo, "¿Estás loco, la fuerza de Apolo puede incluso matar a Tifón, ahora que el padre no ha regresado, vas a tratar con él, no estás buscando la muerte?"

El rostro de Ares se puso rígido, sentado paralizado en el suelo.

"Qué dices que debes hacer, ahora Apolo es demasiado arrogante, su madre ni siquiera lo necesita, ni siquiera tiene el coraje de enfrentarlo. 

Tan pronto como pienso en el cuerpo blanco y esbelto de Afrodita, se ensucia, ¡quiero arriesgar mi vida con él!"

Este dios de la guerra estaba enojado con la espada clavada en el suelo.

En este momento, las cuentas de los ojos de Hermes se dieron la vuelta y misteriosamente dijeron: "Tengo una manera de tratar con Apolo, pero necesito tu cooperación".

Ares mentalmente despierto, con los ojos brillantes, preguntó: "¿Qué método, dices rápidamente".

"No tengas prisa, sigue adelante y escóndete frente al Templo de la Luz de Apolo, espera a que me prepare con cuidado". Hermes dijo con una sonrisa.

Ares no pensó demasiado, tiró su espada al suelo y se apresuró a salir.
Mirando su espalda, Hermes se burló.

“Es realmente fácil ser engañado, ¿este tipo de pensamiento Afrodita también? Sin embargo, solo pensando en esperar a Apolo con él, jeje, soy demasiado inteligente".

Riendo así, activó el poder de 'Viaje' y fue directo al palacio de Afrodita.
"Hermes, ¿por qué viniste aquí?" Afrodita parpadeó con sus hermosos ojos, viendo aparecer la figura.

Tiene muchos seguidores en el Olimpo, de los cuales el principal es el dios de la guerra Ares y este mensajero de los dioses.

Sin embargo, ella sabía que su posición la lograba un hermoso cuerpo, y frente a todos los perseguidores, también era un medio para ahorcarse.

Siempre manteniendo una buena relación, pero sin dejar que se aprovechen.

Utilizando tal método, mantuvo en el Olimpo una posición noble, convirtiéndose en la única que no era hija de Zeus ni esposa de los doce dioses.

Pero tal vida quiere terminar.

"Apolo..".

Recordando esa figura dorada en su mente, su rostro estaba rojo y enojado.

Hermes sonrió levemente y dijo: "No nos sigues para hablar en estos días, ¿es porque quieres casarte con Apolo?"

"Oye, te preocupas mucho por él, pero él siempre está en connivencia con esa pequeña niña Hécate, y no le importas en absoluto.

 Si fuera yo, me casaría contigo, definitivamente te convertiría en el tesoro más preciado y lo protegería cuidadosamente". Su rostro estaba lleno de lástima.