Prólogo

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_Si no es contigo, no es con nadie _
D.F

Vacío era lo único que podía expresar su sentir aparte de un gran bloqueo, pues aquel fluido notoriamente oscuro debido a la poca luz que brindaba la luna se distribuía por el piso y parte de ambos cuerpos, aún sin abrir los ojos su olor era reconocible.

Con las manos temblorosas y la respiración entrecortada debido a el fallido intento de retención de llanto queriendo canalizar sus pensamientos, se separó de el pequeño cuerpo que tanto adoraba.

Pensar mientras todo a tu alrededor parece pasar lento y lejano puede ser imposible, sumando a este una gran cantidad de emociones y visión borrosa por el proceso ya conocido de producción de los lagrimales.
Mira a su alrededor sin evitar regresar su vista al piso, justo donde el cuerpo de su amada se encuentra inmóvil sobre una camilla improvisada.

En la cárcel los peligros son más altos que fuera de esta, apesar de tu mismo ser una amenaza para la sociedad ahí dentro te pueden superar.
El dañar para tomar poder es algo muy común bajo un régimen en prisión, sin embargó ¿a qué costo? Y  ¿Por qué a ella?. El 911 fue atendido de inmediato, pero debido a el lugar el médico de guardia de ese momento tuvo que interferir para intentar salvar a esa alma ¿Inocente?.

Reas fuera y con una gran curiosidad, pues si la chica fallecía, su amada no tendría cordura alguna y lo que parecía un final sería realmente el inicio de un gran y tormentoso infierno. Se sabe que el dolor ciega y por amor se hace todo.

Así es como en un solo segundo la vida te pone abajo y te da esa muestra de que nadie está a salvo y menos en un lugar tan inusual como una prisión, ¿en que momento paso por la cabeza de estas dos amantes un final feliz?.
Bueno los finales felices serán en otras vidas pues en esta solo hay un corazón latiendo y una pareja es de dos.

¿O no?

Atrapada a mi destino Donde viven las historias. Descúbrelo ahora