Naruto, Hijos de la profecia

Capítulo 18: La Calma Y La Tempestad

Naruto estaba sentado en su trono con su rostro apoyado en su mano derecha, estaba recordando la conversación con itachi.
Retrospectiva;
Itachi uchiha estaba en una cómoda cama, sus recuerdos eran confusos y sólo recordó ver un ojo rinnegan escaneando su mente, un aluvión de recuerdos lo atravesaron y su cabeza dolió como el infierno.
Sasuke lo había derrotado con extrema facilidad, no pudo hacer nada frente al poder crudo de su hermanito. Estaba frustrado porque sus planes no iban bien, quería morir a manos de sasuke y que este Regresara a konoha como un héroe por matar al genocida, pero no fue así, se sentía mejor que nunca, su chakra era más denso que antes y no existía ese ardor en sus pulmones, incluso al abrir los ojos notó que su vista era extremadamente clara, como si los efectos del manguekio hubiesen desaparecido. Que mierda estaba pasando. Detectó una presencia poderosa acercándose y luego otra mucho más tenue pero aún poderosa.
Miró hacia la puerta solo para ver a ese chico, naruto uzumaki-uchiha, el joven lo miraba con indiferencia mientras se acercaba con calma.
-cómo te sientes? Itachi - preguntó naruto con voz tranquila,
Itachi entrecerro los ojos pero decidió responder.
-mucho mejor de lo que me he sentido en años, pero... Porque aún estoy vivo? Creí que sasuke me mataría - pregunto el uchiha mayor.

-a pesar de tu genio Eres un idiota, itachi, me costó librar a mi hermano de la maldición del odio en la que lo hiciste caer, incluso mi propia luz. Era mejor que te temiera a que lo incentivaras a matarte tomando su poder del odio. - dijo naruto con tranquilidad.

-Que me hicieron? Porque no puedo sentir el ardor en mis pulmones, y mis ojos están más que claros nuevamente? - pregunto itachi.

-Felicitaciones, uchiha itachi, eres el cuarto portador del manguekio eterno. Y si me preguntas como?
Hace tiempo descubrí que el viejo hokage guardaba los ojos de tus padres para ti y sasuke en el futuro.
Solo tuve que usar a kamui y tomarlos para el propósito para el cual fueron preservados, lo ojos de tu amada madre a la que asesinaste para salvar a ese pueblo asqueroso serán la luz que te guíe en esta nueva vida que sasuke te regaló.
Yo cree el sello que sasuke usó para curarte, pero su uso del mismo no es tan perfecto. Así que tuvimos que operar tus pulmones. Y en ese tiempo de coma inducido también te otorgamos los ojos de mikoto - dijo naruto en modo conferencia.

-y ahora que haré? Estoy sano, no puedo volver a akatsuki, ni konoha.- dijo el cuevo mayor con tono neutral.

-de hecho, konoha te quiere de vuelta, creen que teniendote de su lado podrías detenernos. Dime itachi, te volverías contra tu familia de nuevo por esa aldea? Matarías a tu hermano para proteger a los que no valoran la sangre derramada de nuestro clan? - preguntó naruto.

-nunca fue mi intención regresar a konoha, hice lo que hice por el bien mayor, no significa que lo disfruté, amaba al clan, a mis padres, pero la muerte y destrucción que provocaría esa rebelión, desataria la cuarta guerra mundial shinobi. Cientos de miles morirían - dijo itachi con tristeza en sus ojos.

-entonces quedate aquí, ni-San-dijo sasuke apareciendo de la puerta.
Su mirada era tranquila, y sin ápice de odio o desprecio por su hermano mayor. Solo calidez. Algo que ahora sabía su ototo le había concedido.

Itachi abrió los ojos.
Jamás creyó ver de nuevo esa mirada afectuosa de parte de su hermanito.
El. Creyó que moriría por sus manos, viendo sus ojos sangrientos.
Pero aquí estaba sasuke. Tranquilo.
Ofreciéndole la oportunidad de estar con él, y su "hermanastro".

Naruto Sonrió de lado y comenzó a salir de la habitación.
-Creo que ustedes dos necesitan tiempo para recuperar el tiempo perdido.- dijo naruto. - espera, hermano!, quiero que vayas con nosotros para mostrarle nuestra aldea a itachi - dijo sasuke.
-Hmph, tengo que entrenar - dijo naruto sin darse la vuelta.