Cada que puedo me recuerdo el camino que he recorrido a lo largo de estos casi 13 años no fue sencillo, afrontar a mis padres al dar la noticia de mi embarazo. Debo de reconocer que aunque no a sido fácil ni sencillo he logrado sobrevivir en esta jugla llamada vida, aunque en muchas ocasiones he estado tentada a tirar la toalla no lo he hecho al final, soy un pilar en mi familia, y para mi hija, antes no hable nada con nadie casi todo me lo guarde y al final me a estado cobrando factura, a veces pienso que en mi forma de afrontar mi vida y las situaciones que se me presentan tengo un trabajo muy estable, donde me a permitido poder tener cosas que en estos tiempos es sumamente difícil para una mujer y más siendo mamá soltera , una casa, un trabajo que me da ciertos beneficios adicionales, y un 💜 nuevo para Gabriela a veces he sentido que todo eso a sido un esfuerzo de constancia y tiempo. Por eso aun no entiendo porque algunas mujeres siguen dependiendo de un hombre cuando yo he logrado salir adelante con la ayuda de Dios, familia y mi hija esa niña que su papá no quiso ni siquiera convivir, si es un cobarde de primera.
Cuando a sus 2 meses de nacida fuimos a una consulta con el pediatra, me dice la dra después de hacerle estudios puedo decir que su hija tiene un mal congénito en su corazón y debe de operarse, solo confirme lo que ya sabía porque yo padecí lo mismo años atrás solo que a mi me operaron de emergencia y con ella aun nos daba tiempo, sentí que fueron cubeta con agua fría con mucho hielo, y no renegue solo le dije a Dios ayúdame a poder resistir y darme la fuerza cuando sienta no poder no debía demostrar mi dolor porqué mi hija me necesitaba entera y fuerte, recuerdo a mi mamá decirme por eso no quería que fueras mamá y como evitas eso si al final ya era una adulta mayor con 28 años independiente económicamente aunque en mi plan era tener a mi propia familia la vida me preparaba para avanzar sola sin la compañía de un hombre...
Considerando todo lo que pasaba me aferraba a salir adelante íbamos con mi hija y mi mamá a las consultas estuvimos en ir y venir en el hospital no se cuantas veces hasta que por fin la vida me hacía entender que nada era casualidad que todo tenía propósitos aunque yo no entendiera exactamente en esos momentos....