Namjoon prometió amor eterno a Yoongi.
Hoseok fue rechazado por Taehyung.
Los caminos de este alfa y omega iban el líneas paralelas, hasta que una situación que llaman error comienza a entrelazar sus caminos.
Ambos tratan de negar e impedir esta sit...
Con Yoongi aprendió a no actuar impulsivamente pero justo ahora se encontraba afuera de la casa de Hoseok un sábado por la tarde. Sin darse cuenta la necesidad de ver al omega pelirrojo fue más grande. Él le dijo a Yoongi que no reprimiera sus sentimientos, no hablaría bien de el si reprimía los suyos.
Tomo valor necesario para bajar del auto, caminar a la puerta y tocar el timbre. Jungkook también tenía razón, debía darse una oportunidad. Por azares del destino fue Hoseok quien le abrió la puerta. El omega se sorprendió al verlo, asustado cerró la puerta tras salir.
—Mi padre no ha olvidado tu rostro ¿Qué haces aquí? —hablo alterado.
—Viene a invitarte a una cita —comento con clama. Estaba decidido.
—Y no pudiste hacerlo en el trabajo, este no es lugar para —Hoseok dejo de hablar. Miro atónito al alfa que se veía que con esfuerzo mantenía la calma —¿Me acabas de invitar a salir? —se señaló —¿A mí?
Namjoon rio brevemente por la actitud del omega. Dejo el nerviosismo de lado tomando confianza.
—Lo volveré a preguntar. Hoseok ¿quieres ir a una cita conmigo?
—¿Qué hay del Sr. Min? —entrelazo las manos, ansioso por la respuesta.
—Bueno, te estoy invitando a salir a ti. Seremos solo tú y yo.
—Pero. No estoy seguro —dijo dudoso.
—Entenderé si no quieres. Malinterprete pensando que te gustaba —Namjoon no pensó en que Hoseok no estuviera interesando en él, al final el omega le dijo repetidas veces que sus encuentros habían sido un error —lamento quitarte el tiempo, debes estar ocupado.
Namjoon se abrumo, se iba alejando mientras se despedía. Hoseok lo detuvo tomándolo del brazo.
—¿Hablas enserio? ¿Quieres salir conmigo?
—Por supuesto que si —dio dos pasos adelante, se mostró emocionado.
—Espérame en el parque. Dame 40 minutos.
—Los que quieras —respondió Namjoon feliz.
Hoseok lo soltó, abrió la puerta y entro corriendo a su habitación. Su madre entro detrás de él, lo vio sacar ropa del closet, probarse ropa frente al espejo y sobre todo aprecio la radiante sonrisa que hace un tiempo se estaba apagado. Había visto al alfa de la otra noche irse casi saltando de felicidad. Quería darle el beneficio de la duda. Como padres le dieron los consejos, pero al final cada uno debe experimentar por su cuenta. Se alejo dejando que su hijo siguiera sonriendo.
Estuvo listo así que se encamino rumbo al parque, al dar vuelta en la esquina división el auto de Namjoon. Su corazón latió rápido y su lobo meno la cola, entusiasmado. Quería confiar en que el alfa no se estaba burlando de el como otros, esperaba que esto no resultara un plan para dar celos, rogaba porque no fuera un juguete de nuevo. Esta vez presentía que, si resultaba mal, seria devastador y mucho más doloroso que otras veces.
Dio unos golpecillos a la ventana del auto, escucho los seguros abrirse y entro. Ambos vestían ropa casual. El alfa vestía un pantalón de mezclilla con una camisa azul claro y tenis blancos. Se veía guapo. Sus mejillas se calentaron.
—Te ves bien —menciono Namjoon sin apartarle la mirada.
Hoseok vestía jeans de mezclilla, camiseta negra y encima una camisa roja lisa, junto a tenis blancos.
—Gracias. También te ves bien —respondió tímido.
Era inevitable sentirse nerviosos en especial cuando tenía preguntas sin respuesta. Por su parte Hoseok tomo la decisión de no mencionar a terceros. Namjoon había dicho que serían solo ellos y así debía ser. Lo que si es que esperaba saber la razón por la que estaban teniendo una cita.
El alfa condujo durante cinco minutos sin rumbo. No tuvo una cita antes. Muchas veces se imaginó saliendo con Yoongi. Tenía tantos lugares en mente y a la vez nada, no sabía que le gustaría al omega sentado a su lado. Se orillo deteniéndose.
—¿Pasa algo? —pregunto Hoseok curioso.
—Me preguntaba si tenías un lugar especial —pregunto sin mirarlo. Le daba vergüenza que el omega se diera cuenta de que no tenía nada planeado.
—¿No planeaste nada? —el omega rio —está bien, no pasa nada.
—Lo siento —lo miro con culpa.
—Dije que estaba bien. No tienes que disculparte siempre. He dicho que está bien.
Hoseok era diferente a Yoongi. Con Yoongi se la vivía disculpándose aun si no era su error y el omega lo aceptaba. Hoseok era comprensivo.
—Me gustan los lugares tranquilos —comentó el omega pensativo —que te parece ir a comer, luego un café o helado y podríamos terminar en un bar. A los dos nos gusta beber —termino con una sonrisa cómplice.
—Me parece buena idea —sonrió el alfa.
Namjoon lo llevo al mejor restaurante que conocía, uno de sus favoritos. Le sorprendió como después de sentarse alrededor de la mesa y con una copa de vino en mano la plática fluyo. Hoseok y el no estaban tan lejos de tener gustos similares. A los dos les gustaban los musicales, las películas de acción y de vez en cuando de romance. Ambos eran hijos únicos por lo que entendían como se sentía el otro, compartían en especial las ventajas de ser hijos únicos.
Para la hora del postre decidieron ir a una cafetería. Pidieron batidos, Namjoon pidió variedad de postres cuando el omega le comentoque le encantaban lo dulce. Hoseok fue feliz con ello. La cita iba bien.
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