𝑺𝒊𝒏 𝑭𝒓𝒆𝒏𝒐𝒔

Capítulo 19

___: Creo que nunca he hecho tanto ejercicio en mi vida. -dije mientras caía de espaldas al sofá-.

Terminé de dar el concierto con bastante éxito, me encantaba la energía del público, era algo que adoraba.

Cerré los ojos intentando regular mi respiración hasta que sentí a alguien sentándose a mi lado, era inconfundible su olor a vainilla.

Billie: ¿Destrozada? -dijo muy cerca de mi cara-.

Abrí los ojos lentamente y miré a la preciosa ojiazul que estaba mirándome con una sonrisita.

Ugh, que tierna es.

___: Un poco, ¿me darías un beso para recomponerme?

Billie: Bien, pero sólo porque estás cansada.

Se acercó un poco más y me dio un beso tan lento que perdí la noción de todo mi alrededor.

Se separó de mis labios y juntó su frente con la mía.

___: Ya no estoy cansada.

Bill rió en bajito y me volvió a besar.

Si seguía haciendo eso acabaría enamorándome.

Billie: Tengo que hablarte de algo preciosa. -dijo un poco más seria-.

___: Ay no, ¿es algo malo?

Billie: Desgraciadamente, sí.

Me senté bien mirando de frente a la ojiazul, tenía bastante miedo de lo que me fuera a decir.

___: Está bien, cuenta.

Justo entró mi hermana sin avisar, otra vez. Nos miró con el ceño fruncido.

Carolina: ¿Qué os pasa, por qué me miráis así?

___: Porque has entrado sin tocar y porque nos has interrumpido.

Carolina: No me doy cuenta de tocar, y he venido aquí para avisarte de que nos tenemos que ir ya al hotel.

___: Vale, ahora vamos.

Carolina salió cerrando la puerta, me giré hacia Billie.

___: Lo siento, ¿podemos hablarlo cuando lleguemos? -pregunté a la vez que cogía sus dos manos entre las mías.-

Billie: Claro, no pasa nada. -dijo para después darme un pico.-

. . .

Había pasado un rato que llevábamos en la camioneta.

Ahora me encontraba en los asiento de atrás junto a Billie.

Tenía puestas mis piernas encima de las suyas mientras que ella me ponía uno de sus brazos alrededor de mis hombros.

Estábamos viendo en su móvil vídeos en instagram de nuestros fans, cocina, de perritos... de todo un poco.

Lenvanté un poco mis ojos para ver la hora.

Las once de la noche.

___: Hermana mía, ¿cuánto falta para que lleguemos?

Carolina: No estamos yendo al hotel, vamos a ir a Taco Bell.

Billie: ¡¿TACO BELL, DÓNDE?!

___: Joder Billie, me has reventado el tímpano. -dije sobándome la oreja.-

Billie: Perdón enana, es que cuando se trata de comida me emociono mucho. -dijo para después darme un beso en la mejilla y acercarme más a ella.-

Carolina: Sois asquerosamente tiernas, pero en fin, quedan cinco minutos y ya vamos al apartamento.

___: Está bien.