2020

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- ¿No vas a entrar? - dijo el más alto al mirar como el castaño veía la casa con la boca abierta. Ya habían llegado al sitio que marcaba el mapa, pero para nada RenJun esperaba algo asi, incluso comenzaba a pensar que era el lugar equivocado.

- Eh...si - sacudió suavemente su cabeza, no era una "casa" era una mansión, al menos para RenJun - muchas gracias por la ayuda - hizo una reverencia a los cuatro.

Luego de que ellos continuarán su camino, RenJun dio la vuelta y se quedó mirando la casa al no saber que hacer pero Jeno vio una última vez al menor, quién seguía afuera, observando la casa a detalle. Soltó una pequeña risa ante de acercarse corriendo.

- Veo que no tienes llaves - volvió a sonreír - ¿Sabes? Mi abuelo solía decir "a veces solo hay que buscar en las flores para encontrar la llave" - levantó un poco una maceta pequeña con flores color azul, debajo de la misma había una llave, la tomo y se la entrego al castaño.

RenJun se quedó mirando a Jeno, juraría que le era parecido, su sonrisa, ojos, ¡todo! incluso su voz. Al sentir la mano ajena sobre la suya, inmediatamente reaccionó, mirando la llave y asintiendo haciendo otra reverencia después para agradecerle.

- muchas gracias - murmuró sin mirarlo.

Jeno regreso con sus amigos luego de sonreírle aunque esté no pido verlo, dejando a RenJun con la llave en mano que aún dudaba en entrar. Era una casa grande, dos plantas, un jardín grande.

¿Y si alguien ya vivía ahí? Aún con este pensamiento, la casa parecía ¿Abandonada? Quizás no era la palabra correcta.

Lentamente ingreso la llave y dio vuelta dos veces, con la tercera vuelta la puerta se abrió, se asustó un poco por esto pero luego de dudarlo, empujó un poco la ya mencionada, abriéndola por completo tras unos segundos. Alzó la mirada, todo estaba tan...diferente.

Frente a él estaban unas escaleras enormes pero, primero se adentro a la casa, el piso parecía ser de madera color blanca, el cual era brillante, a su derecha había una habitación así que decidió entrar en ella.

Dos artefactos color gris con algunos papeles pegados en ellos pudo leer sus nombres "lavadora y secadora", sorprendido se acercó un poco para verlas mejor ya que eran muy distintas a las que ya conocía. Además, juntos a ellas había accesorios para lavar ropa, incluyendo jabón.

Del lado izquierdo de esa misma habitación estaba una puerta que dirigía a lo que parecía el patio, que pudo verlo gracias a la ligera transparencia de la puerta.

Salió de ahí, del lado izquierdo de las escaleras estaba la sala principal, tres sofas color negro, una pequeña mesa en el centro, plantas, una chimenea del lado derecho y una...¿Televisión? Leyó el papel que estaba sobre la enorme pantalla plana.

- ¿Eso es...- murmuró mirando el artefacto - una televisión? - con las yemas de sus dedos tocó la suave pantalla - es enorme...

Se dio la vuelta en dirección a la sala era de un espacio cómodo, debía admitir. Sin embargo, siguió avanzando hasta encontrarse con otra puerta grande de cristal.

Con cuidado la abrió y entro reconociendo inmediatamente que era la cocina donde encontró encimeras color negro brillante, en los cuales había electrodomésticos, muebles, una estufa, una nevera enorme y una pequeña barra junto a unas sillas acolchadas.

Del lado derecho había otra habitación que era el comedor, donde había una mesa con seis sillas y del lado izquierdo una puerta con marco negro y el cristal oscuro, a su derecha se encontraban otras dos puertas.

Entonces se dirigió a la entrada de cristal oscuro, abriéndola con cuidado encontrándose con un patio enorme, una gran valla de madera blanca alta lo aseguraba, del lado izquierdo había una pequeña mesa con dos sillas, del lado derecho una heladera junto a más asientos, alrededor de la valla había plantas y no solo eso, sino que también había una piscina y máquinas de ejercicio.

CHICO RARO [Adaptación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora