Almas gemelas

Perfectos

Hola Chic@s, quiero desearos una buena lectura, es mi primer fanfic, espero que os guste. Un fuerte abrazo.

CAPÍTULO 1: PERFECTOS

Harry y Ron se despedían en el andén nueve y tres cuartos de Hermione y Ginny, después de la guerra habían sido admitidos en la escuela de aurores y habían decidido dejar sus estudios, Hermione, por su parte, decidió volver a Hogwarts y acabar su séptimo y último año para poder sacar las mejores notas en sus ÉXTASIS para poder optar a un cargo de alto rango en el ministerio de magia.

-Y sobre todo, tener cuidado ya sabéis que Malfoy ha vuelto a Hogwarts como parte de su acuerdo con el ministerio.

-Harry, no nos va a pasar nada, tranquilizate un poco.- Ginny le dió un beso en la mejilla a su novio y miró a Hermione.- Subamos al tren antes de que nos secuestren y nos encierren en una torre de cristal.-Hermione se rió, abrazó a sus dos amigos y subió al tren junto a su mejor amiga.

-Enviarme cartas todos los meses o os mataré.- Dijo Hermione a sus amigos antes de despedirse, finalmente, con la mano y una sonrisa. Las dos jóvenes entraron en un vagón vacío y se sentaron.

-Ron y Harry son unos exagerados, todos vimos como los Malfoy ayudaron en la guerra, sobre todo la señora Malfoy, que no delató a Harry, tendría que confiar más.-Dijo Ginny mientras se comía un regaliz.

-Ya lo sé Ginny, pero Harry siempre ha sido así de alarmista, aunque declaramos a favor de los Malfoy en su juicio, no entiendo esta preocupación absurda.- Hermione rodó los ojos y se puso a leer mientras Ginny miraba por la ventana.

-Sabes Hermione, siempre he creído que Malfoy no era tan malo como aparentaba, siempre ha estado condicionado por alguien, nunca ha elegido por él mismo.-Hermione levantó la vista y miró a su amiga.

-Ginny, tampoco creo que debamos confiar en él, después de todo sigue siendo Malfoy, el mismo que me insultó durante años.-Ginny la miraba sin decir nada.-A ver, no creo que sea como antes, aunque no lo justifico.

-Voy a cambiar de tema de una manera muy drástica, pero me muero por preguntar.-La pelirroja se sentó junto a su amiga, con los hombros tocándose.- ¿Por qué lo has dejado con mi hermano?.-Hermione la miró con los ojos muy abiertos.

-Emm, pues...-Hermione no sabía muy bien qué contestar, al fin y al cabo era la hermana de Ron.- Por que me di cuenta de que no lo quería de una forma romántica, si nos besamos al acabar la guerra, pero creo que fue la emoción, el cariño y, tal vez, lo que alguna vez llegué a sentir por él, pero cuando llevábamos unos meses juntos, no podía quitarme de la cabeza que solo lo veía como un amigo, como mi mejor amigo.-Hermione se calló y miró a su mejor amiga.- Le quiero Ginny, pero como amigos.

-Yo me olía algo.-Hermione la miró para que siguiera explicando.- ¿Sabes aquella vez que estábamos todos en la madriguera, el día de la barbacoa al estilo muggle?.-Hermione asintió con la cabeza.- Ron no dejaba de mirarte embobado, enamorado, y entonces te miré a ti y tu no le mirabas de la misma manera Herms, tus ojos transmitían cariño, si, pero no amor. Me jode que no acabéis juntos, porque eres mi mejor amiga y él mi hermano, sería toda una fantasía tenerte en casa, pero entiendo que tu no le quieras de la misma forma, no te culpo ni te juzgo, nunca lo haría Hermione.-Cuando Ginny acabó de hablar, Hermione la abrazó con todas sus fuerzas, y esta correspondió al abrazo con más fuerza.

-Te quiero Ginny.

-Y yo a ti Herms, ahora a cambiarnos o no llegaremos.- Las dos amigas se pusieron el uniforme y esperaron sentadas hasta que el tren se paró. Cuando bajaron, vieron a Hagrid, con los niños de primer año, lo saludaron con la mano y siguieron su camino hasta encontrarse con Neville y Luna.