Redeem (Libro 2 Dinastía Indestructible)

Capítulo 28

Bernardo

Pasar toda la vida en Alemania es una ventaja porque conoces cada rincón , los contactos son necesarios y lo entendí a las malas cuando me arrebataron a mi familia

Hace mas tres años fui emboscado para que tanto mis hijos como yo fuéramos llevados a servir a Otto Meyer quien necesitaba de gente ya que las condiciones en que las mantenía daba para que estas no soportaran vivir por muchos días

Esa noche durante la cena , varios hombres entraron a mi casa tomándonos por sorpresa , me encañonaron , amarraron a mi esposa y arrastraron a mis pequeños hijos. Solo era un periodista que trabajaba en un pequeño periódico de los suburbios de Múnich , trataba de llevar la vida lo más tranquila posible y tenía planeado salir con todos de ese lugar para irnos a Italia a fines de mes pero todo se derrumbó cuando escuché la primera detonación que me redujo a gritos desesperados por llegar a ellos.

El segundo disparo me quebró , y el tercero me dejó sin saber como respirar cuando el charco de sangre que inundó el piso del comedor solo iba incrementando. Solo pude abrazarlos , que nadie los tocara , que no me los quitaran.

No tenía una sola razón para seguir y las autoridades lo único que pudieron declarar a los periodistas fue "ataque por venganza"

¿Venganza? Que carajos iban a vengar contra mí si en ese momento no sabía usar una estupida pistola siquiera

Días después atando cabos de investigaciones antiguas entendí que esa misma gente trabajaba con los Meyer , solo eran subordinados de la 'Ndrangheta. Así que contar con las autoridades para obtener justicia solo era un sueño estupido. No iba a permitir que mi familia se quedara sin ser vengada. Nunca fui partidario de la violencia , me alejaba de las riñas y de los pleitos que no me incumbian

No fue difícil saber quienes eran los que estaban en constante guerra contra los Meyer , entrar a la mafia roja no resultó tan fácil como lo hacen ver. Tuve que pasar diferentes pruebas antes de poder tener una reunión con uno de los entrenadores que reclutan a los voiny ada. Fue una completa tortura pasar por pistas que jamás imaginé ver pero mi motivación era clara. Cada que mi cuerpo pedía un descanso o quedarse atrás recordaba el porqué debía mantenerme en pie

Cuando fui llamado por el mismísimo korol , fue una sorpresa total. Entre cientos me eligió.

Mi entrada a la mafia rusa fue inevitable , saber que estaría a cargo de llevar al hijo de Otto Meyer en verdad resultó la mejor casualidad que me pudo ocurrir.

Me desquité por todo cuando llegó la hora y lo disfruté como un maníaco. Hice uso del tan pregonado dicho , ojo por ojo

Pero después me sentí sin motivos más que el trabajo para continuar. Para algunos resulta una buena idea pero no para alguien que ya vivió con todo lo que necesitaba.

Una morena diminuta y con una obsesión por la moda fue un tormento para mí en sus inicios. Es que verla tan escuálida puede dar la idea de ser una mujer con los planes que sé escuchar todo el tiempo. Pero resultó que ella ya tenía eso y más.

Es una atrevida que toma los riegos como si solo fueran su meta pisotearlos a su gusto. Hay muchas como ella , pero es la primera que llamó mi atención. No puedo decir que tiene algo que la hace única pero me descontrola , me vuelve un demente teniendo su nombre en mi cabeza como si esa fuera mi tarea. Kyra Ahmadi , hermosa de cuerpo entero , es tan diferente que cuando la vi en ese bar donde me daría las próximas instrucciones que enviaba el korol tuve que verificar cada dato. Por seguridad ya que así como ahora la muerte solo era cuestión de jalar un gatillo

Un metro cincuentidos de puro desequilibro para mí , pero admito que me gusta que lo haga.

Es una enojona , y nos complementamos con los horarios pues al ella ser una de las mejores por no decir la mejor de su tipo tiene viajes que salen de la nada y me gusta ver como habla de diseños nuevos , de metas que se puso recientemente en esas noches donde podemos ser solo los dos. Tengo una semana de no verla en persona pero unas pocas horas de no poder hablar con ella.