Negro || Catradora || AU

Negro

Era un día normal en Luna Brillante, o lo que era normal para aquellos que la habitaban. Dentro del castillo, en la habitación de Catra y Adora estaban ambas mientras acompañaban a su pequeñe hije, Finn, hacer la tarea.

—Mamás, ya acabé —avisó Finn, mientras que Adora se levantaba a revisar los ejercicios de matemáticas que había hecho, Catra le dio uno de los pequeños panquecillos que había tomado de la cocina.

—Muy bien, Finn ¿Falta algo más? —preguntó Adora una vez que los reviso todos y se aseguró que estuvieran bien

—Sip, Lance me pidió que les dijera a ustedes que me contarán como salvaron el mundo con su amor —contesto inocente el niño mientras disfrutaba del postre

—¿Qué? —Catra se levantó del sofá en el que estaba tirada de manera desganada para poder mirar mejor a su hije

—Eso, también se los pidió a mis amigos —contestó Finn mientras veía a sus madres

—Bueno, tarea es tarea —dijo Adora mientras sentaba en el piso y ponía a Finn en sus piernas— Ven acá Catra

—Ya voy —contesto la felina de manera desganada mientras iba a un lado de su esposa y su hije

—Todo empezó en la Horda... —comenzó Adora— éramos dos jóvenes que estaban criadas para dar frente a la guerra en nombre de la Horda, siempre nos dijeron que buscábamos la paz y el orden en Etheria y que las princesas eran malas

—Pero tu eres una princesa —interrumpió Finn

—Pero en ese entonces aun no lo era, a diferencia de tus tías yo no nací siendo princesa —explicaba Adora cuando fue interrumpida por su esposa

—Se convirtió en She-Ra cuando encontró una espada mágica en el bosque

—Shhhh, todavía no llego a esa parte —reprocho Adora a Catra

—Es que dices todo muy lento —se quejó

—¿Entonces como lo harías tu? —desafío la rubia mientras que su hijo veía entretenido otra de las infantiles peleas de sus madres

—Sencillo —Catra se sentó de mejor manera y atrajo a Finn hacia ella sentándole en sus piernas— Estábamos en la Horda, tu madre encontró una espada y poof, She-Ra, luego se fue con tu tía Glimmer y tu tío Bow y me dejó sola en la Zona del Terror, se hizo una princesa y empezó juntarse con más princesas y luego empezamos a pelear siempre, después abrí un portal y tu madre me odio por eso, y luego... Luego... Luego chispitas activo el corazón de Etheria y Hordiano nos llevo a ella y a mi a su nave y después la tonta de tu madre casi se sacrifica por millonésima vez, me uní a la rebelión, y con tu madre y tus tíos encontramos la manera de desactivar el corazón, pero había un monstruo que casi nos mata y cuando llegamos al corazón tu madre casi se muere, pero le dije ¡Te amo! Y no se murió, me vio con su cara de tonta y me pregunto ¿Me amas? Cuando ya le había dicho que la amaba

—Y ella me dijo idiota —interrumpió Adora

—Shhh, mi historia. Como decía, luego me dijo que también me amaba y nos besamos, y una luz rara nos rodeo y boom, de nuevo She-Ra después de eso me dijo que me amaba de nuevo y ambas salimos de ese lugar, pero tu madre siendo buena rubia llamo toda la atención, convirtió la nave de Hordiano en un árbol enorme y libero la magia de Etheria y ahora por eso tenemos esos raros pájaros que no nos dejan dormir ya

—Wow...—dijo sorprendide Finn, sus madres no solían decirle nada de eso y tampoco es que le interesará mucho, pero después de que comenzó a ir a clases con George y Lance, y de vez en cuando Entrapta. Era cuestión de tiempo para que ellos le quisieran enseñar eso a sus hijos— ¿En serio paso así, mamá? —pregunto viendo a Adora