Minecraft: Light Novel

CAPITULO 2

En una enorme cueva se encontraban los escombros y los restos de árboles que habían quedado tras el enorme choque de poder. Entre los restos de rocas se veía como Steve se encontraba inconciente pero apesar de la enorme caída este no parecía estar tan dañado incluso con el peso extra de la chica que había caído encima de él.

El castaño comenzó a despertar sintiendo como todo su cuerpo le dolía y en especial la espalda, dando un pequeño movimiento con su cabeza pudo ver cómo Zaria estaba inconciente encima de este, Steve comenzó a ponerse de pie provocando que la chica Creeper cayera al suelo pero aún con esto no despertó. -Si que fue una gran caída-. Decía el castaño mientras miraba el techo destruido de la enorme cueva, dejando de mirar el techo se enfoco a su alrededor percatando se que no se trataba de una simple caverna pues en esta se encontraba algunos barriles y cofres además de unas cuantas alfombras. -Parece como si alguien viviera en este lugar-. El joven comenzó a caminar para inspeccionar aquellos cofres y barriles encontrándose una enorme reserva de comida.
Por otro lado Zaria comenzaba a abrir sus ojos lentamente pues apesar de haber caído en la espada del castaño está aún estaba algo lastimada.

-¿Dónde estoy?-. Se preguntaba mientras se ponía de pie, cuando estuvo completamente reincorporada decidió investigar donde se encontraba. -No veo a ese Humano por ningún lado-. Decía mientras caminaba a algunos de los cofres que había en el lugar, cuando estuvo lo suficientemente cerca de los cofres logro ver cómo uno de estos parecía diferente al resto pues este tenía una extraña apariencia ya que tenía adornos por todas partes.

-Bueno no encontré ninguna salida-. Steve que había estado buscando una salida regresaba al punto donde había caído anterior mente para pensar en como salir del lugar. -Lo bueno es que recupere mi mochila, lo malo... -. Antes de que pudiera terminar su frase vio como la chica Creeper abría un cofre con apariencia extraña. -¡ESPERA! DEJA ESE COFRE-. Grito un poco asustado pero había sido algo tarde Zaria ya había abierto el cofre por completo.

-¿Porque gritas?Pareces un loco-Dijo un poco fastidiada pues los gritos de Steve habían hecho eco en la cueva provocando un enorme ruido. -Además... estos cofres no son tuyos así que deja de estar molestando-. Dijo para después volver a hurgar entre las cosas que se encontraban en ese cofre.

-*Que bien, no fue un cofre trampa*-. Pensaba mientras daba un suspiro. -Por cierto deja de estar de metiche y deja eso que no te pertenece sucia ladrona-. Dijo recuperando su tono molesto ay así llamando la atención de la joven Creeper.

-A quien llamas sucia ladrona, idiota-. Dijo molesta mientras se ponía de pie y se giraba para verlo directamente. -Por si no lo has notado este lugar está abandonado así que no importo si tomo lo que quiera, además de que te quejas los de tu especie solo saben tomar cosas que no les pertenecen estén abandonadas o no-. Eso era cierto, por lo general la raza humana siempre se había apropiado de todo lo que quisieran lo que los llevo al borde de la extinción. -Además... -. Zaria levanto sus manos mostrado un par de brazaletes de plata con algunas piedras preciosas incrustadas en ellos. -Estos brazaletes se me ven increíbles-.

-Espera, esos brazaletes están...

Antes de que Steve pudiera terminar su oración la chica Creeper callo al suelo muy cansada provocando la preocupación del castaño.

-¿Oye estas bien?-

-AHHHHHH~

El grito de dolor de la chica alertó aún más a Steve quien por instinto se acercó lo más rápido posible al cuerpo de la chica quien se estaba retorciendo por el dolor, cuando el castaño se acercó lo suficiente a Zaria está dejo de gritar y de retorcerse pero aún parecía muy agitada además de que se encontraba respirando muy fuerte como si el aire se escapara de sus pulmones.