El infierno de Takeo

Capítulo 3- Soborno

-¿Que es lo que quieres?- Preguntó Takeo lanzando una mirada de odio al hombre que estaba frente a él.

-Quiero el dinero que me debes.- Dijo encendiendo un cigarrillo...

-¿Porque debería dártelo? Tu no cumpliste con tu palabra y me arruinaste la vida.

-El acuerdo era que al llegar el final del mes si no me entregabas el dinero que me debías tu mujer moriría...- Solto el humo de su cigarrillo y lo tiró al suelo para luego pisarlo con sus elegantes zapatos.

-Todavía faltaba mucho para que el mes terminara y aún así la mataste...¿Porque debería darte ese dinero ahora? Dame una razón válida para ello.

-¿Quieres una razón? ¿Que tal si lo haces por tu hijo?

-¿¡Que le hiciste a mi hijo!?- Preguntó Takeo avalanzandose hacia el contrario agarrándolo de la camiseta.

Los hombres al ver tal acción por parte de Takeo, levantaron sus armas prontos para disparar.

-¿¡Quién les dio permiso a ustedes para usar las armas!?- Dijo un enojado Tanaka el cual se soltó del agarre de Takeo.- No le he hecho nada, pero si no me das ese dinero ya sabes lo que le pasará a tu preciado hijito.

-¡Quiero verlo!-Dijo el padre del adolescente ignorando por completo lo que había dicho el contrario anteriormente.

-De acuerdo, sígueme.

Takeo, Tanaka, y sus hombres empezaron a caminar por un largo pasillo el cual llevaba a una habitación la cual estaba trancada con muchos candados.

-Aquí está tu hijo.

-¿Papá?- Preguntó una voz desde el otro lado de la puerta...

-¡Te sacaré de aquí hijo! Lo prometo.

-Papá yo- El chico no había podido terminar su oración ya que había sido interrumpido por Tanaka.

-Bueno, suficiente. Si quieres ver a tu hijo sano y salvo debes devolverme ese dinero.

Takeo estaba en aprietos, ese dinero lo había donado a un orfanato, no le quedaba ni un peso.

-¿Me puedes dar un tiempo?

-...¿Que? ¿Acaso no tienes el dinero?

-No, no lo tengo-Respondió  con voz firme.

-Te daré cinco meses.

-¿¡Cinco meses!? ¡Estas loco! No puedo juntar tanto dinero en 5 meses.

-Ni modo, solo te doy 5 meses, y más te vale que para ese entonces me tengas el dinero ¿Escuchaste?- Dijo Tanaka con un tono frío y amenazante.

-Solo te pediré que por favor no le hagas daño a mi hijo...Por favor...

-Eso depende de ti Takeo, depende de ti...

Cuando Takeo salió de ese lugar pensó en miles de formas para poder salvar a su hijo. Juntar ese dinero iba a ser complicado y más si solo tenía cinco meses para hacerlo...