La mayoría se ha enamorado alguna vez en su vida, si no ha pasado, lo harán. Es un echo científico que cada persona se enamorara de siete persona al menos en su vida.Unos tienen la suerte de ser correspondidos, otros, no tanta.
Sin embargo, Shoto Todoroki e Inasa Yoarashi tuvieron la suerte de encontrarse primeramente sin necesidad de buscar a otras seis personas que, a su corazón, les hacía perder los estribos.
Algo que se suele decir o escuchar, es que al enamorarse, te pones nervioso, comenzar a sudar es común, pero en realidad, no era como se describe.
Enamorarse es justamente lo contrario, significa paz y tranquilidad, comodidad de estar con la persona, que su compañía te haga sentir pleno y completo. El nerviosismo real, no es el que viene acompañado de gases, es el que está conjunto una calidez en el corazón.Shoto era jodidamente feliz desde que aquel chico correspondiera a sus sentimientos. Por Dios, era jodidamente feliz desde que lo conoció.
Obviamente era recíproco, de no ser así, muy probablemente no estarían así, disfrutando del calor del contrario en una cama matrimonial en un cómodo abrazo mutuo. Era cuestión de minutos para que la alarma que comunicara las 6:00 de la mañana sonara y los forzase a levantarse de su confort para ir a comprar un par de decoraciones, tendrian invitados por la tarde y no quería que un desastre (totalmente inexistente) de su casa los recibiera. También debía tomar una ducha y desayunar en el proceso.
Inasa había abierto los ojos antes de que ese aparato molesto sonara y no lo iba a desperdiciar. Muy probablemente su yo del pasado intentase volver a consiliar en sueño para no sufrir al despertar, pero actualmente lo único que pasaba por su mente era voltear a ver a su esposo.
Dormido era un ángel, sus facciones totalmente relajadas y un rubor en sus mejillas... Lo que daría por ver eso todo el día...
Pero no, para su desgracia, la alarma comenzó a realizar el sonido constante que se sabía de memoria de tanto ser oída.
"beep, beep"
El cuerpo que se encontraba a su lado comenzó a moverse, sus ojos se cerraron con fuerza mientras soltaba un bostezo que era cubierto por sus manos, seguido de tallarse los ojos y buscar con la mirada al hombre que amaba.
-Buenos días- Soltó el bicolor con claro cansancio en su voz y cuerpo.
-Buenos días, ¿Cómo dormiste?- Respondió el pelinegro con ternura, realmente su cara de recién levantada lo embobaba como no creerían.
-Supongo que bien, pero sigo cansado-
Sip, definitivamente esa vocesita casi nula por su reciente despertar no tenía precio, era algo que en la actualidad, le pertenecía a su totalidad.
-Tiene sentido, dormimos hasta muy tarde anoche, el trabajo de héroes es maravilloso pero no nos deja descansar-
Una vez dicho eso, Inasa se acercó a su pareja para plantar un beso en su frente, no se habían lavado los dientes a ese punto, luego de realizar esa acción, lo besaría como corresponde.
Su rutina mañanera comenzó con una ducha a la ingresaron por separado, continuó con un cepillado de dientes (seguidos del beso, claro está) para luego bajar a preparar el desayuno. Cabe recalcar que durante este último, siguieron un paso que solo ellos conocían, consistía en que Shoto estuviese frente a la estufa, con la diferencia de que el no era quien estaba al mando de la sartén. Inasa se colocaba detrás de su pareja abrazándolo mientras se escuchaba como el tocino crujía de estar dentro del aceite hirviendo, con la cabeza recargada en el hombro del bicolor. El menor de los Todoroki era sorpresivamente pequeño, su cintura era pequeña por lo que no limitaba la movilidad de los brazos del contrario y podían cocinar sin problemas. En la práctica que establecieron en la UA, pasaron por un par de quemaduras, pero ahora eran expertos.
Si les dijeran a sus yo's del pasado que se encontrarían así, los creerían locos. Inasa con su actitud energética, mayormente alejaba a las personas y por esa misma razón que conocía, si pensaba a futuro se lo imaginaba totalmente solo, con un perro de compañía quizás, pero no más que eso. Por otro lado, a Shoto no le interesaba ni en lo mínimo conseguir pareja, su padre le había controlado hasta ese aspecto de su vida, llevándolo a citas a ciegas para quizás conseguir una alianza entre agencias de héroes y escalar un par de posiciones.
Já, Quien hubiera imaginado que estás dos personas terminarían con un amor infinito mutuo y fijado por un anillo de bodas.
Pasaron muchas cosas en el proceso: Izuku se fue de la escuela por el inconveniente de la Liga de Villanos para luego regresar y con el tiempo, ser el héroe número uno; El hermando de Iida salió del hospital con movilidad limitada, pero podía caminar; Dabi se declaró como Touya, siendo recibido de brazos abiertos por toda su familia (sí, por parte de Endevour también); por un error de fabrica, las pastillas para la migraña dieron la oportunidad de dar vida a los hombres... Pero aún no estaban listos. También algunos de sus amigos se casaron, como Bakugou y Kirishima, Momo y Jirou, Tsuyu y Uraraka, Shinso y Denki... Wow, poniendo esto en palabras, fueron la generación más homosexual posible.
El más importante cambio, fue el de sus personalidades. Las personas que llamaron extraña a su relación podían tener razón. Sus personalidades juntas no cuadraban, pero aún así lograron enamorarse perdidamente. Su manera de pensar y actuar definitivamente fueron un problema al inicio, pero su respuesta a esto fue modificarse un poco para la comodidad y duración de la relación.
Ahora comían en un cómodo silencio, para que con toda la calma del mundo, pudiesen arreglar la casa. Los invitados llegarían en unas cuantas horas y querían prepararse.
Lo que no contaban era que las visitas los llevarían a un viaje al pasado, narrando como cambiaron completamente, viendo diferentes perspectivas de un mismo acontecimiento. Y... Una noticia emocionante.
. . .
1010 palabras
Espero les vaya gustando, pronto estará el nuevo capítulo aquí.
Xao~~~
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Progresando...
FanfictionTodo romance tiene sus fallas, ese es el punto del amor, "cambiar por el bien del otro" es la frase que lo describiría sin necesidad de entrar en detalles. Shoto e Inasa son pareja de casados, una muy extraña a parecer de la mayoría, pero si se mir...