Capitulo 3: Reencuentro

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*flashback*
RINGGG. Suena la campana que indica el fin de clases por el día.
"Ahh, no puede haber mejor sonido que el de la campana"- se escucha a Dylan decir en medio del pasillo mientras Kelly guardaba todo en su casillero.
Kelly's pov
Ese idiota...- pienso para mis adentros mientras lo veo acercarse.
"Heyy, chicos!, es la señorita Kelly Johnson aquí presentes dice dylan dirigiéndose a mark y john, sus mejores amigos, iguales de idiotas, y hermosos, que él. Mientras todas las chicas del instituto lo aman, yo lo odio, aunque admito que esta muy bueno, pero sigue siendo un idiota- "Oye Kelly, me prestas ese..libro que tienes allí?"- le grito mientras él se va corriendo con mi libro es sus manos.
Lo persigo con toda la velocidad que pude hasta que entra al baño de hombres. Me detuve en la puerta gritándole.
"Dylan! Devuelveme mi libro!!- le grito tratando de no llorar. Ese libro era lo mas preciado que tenía, ya que fue un regalo de mi padre antes de ir a la guerra, y morir en acción.
Él se fue de casa cuando yo tenía 7 y los siguientes 10 años de mi vida fueron los mas duros. Mi padre era una gran parte de mi vida.
Estaba esperando alguna respuesta de Dylan pero no escuche nada hasta que de repente lo veo salir de uno de los baños, escuchando al inodoro sonar.
Se acerca a mí entregándome el libros "gracias johnson!, me sirvió de muucho"- y me guiña un ojo mientras se alejaba por el pasillo.
Dylan's pov
Me dolía, me dolía hacerle eso pero que otra cosa puedo hacer? Todos esperan eso de mí, en casi contrario mi reputación quedaría arruinada.
Me alejaba de ella caminando por el pasillo cuando decido ver para atrás rápidamente y la veo, hermosa ahí. Estaba sentada en el suelo, viendo que a su libro le faltan paginas, y llorando. Que idiota que soy. Quería ayudarla, quería secar esa hermosa cara, quería decirle que las paginas faltantes las tenia yo, no las había tirado, nunca las tiraría.
Kelly's pov
Llegué a mi casa odiando el mundo. No quería saber nada de nadie. Solo quería encerrarme en mi habitación y llorar a mares. Odiaba tanto a Dylan en ese mismo momento. Decidí llamar a Ben, quien estuvo enfermo estos últimos días.
"Hola querida Kelly!"- escucho a ben a través del teléfono, con su energía y felicidad de siempre- "¿Como va todo por el mundo instituto?"
"Horrible!, de verdad te necesito"- le respondo desesperada
"Es Dylan otra vez, verdad?"- ben me conoce demasiado- "Juro que algún día lo mataré"
"No te gastes, no vale la pena"- le digo tranquilizandolo.
"Bueno, johnson, que bueno que me llamaste, porque alegraré tu día"- lo escucho sin comprender.
"Que has hecho ben?"
"Hey, mujer, no te me pongas así, no he hecho nada malo!, simplemente vas a ser tía"
"Eh? ¿De que estas hablando?"- le digo comprendiendo aun menos
"Es que bueno, al parecer embrazé a una chica, en una fiesta, es que estaba borracho y..."
"¿¡QUE HICISTE QUE!?"
"jajajajaja, estoy bromeando contigo!!, no he hecho nada malo, simplemente te iba a decir que ya no estoy enfermo, mañana mismo voy a ir al instituto así que ya no sufrirás, SUPERBEN VA A TU RESCATE!"- me dice ben haciendo que me ría, él si que sabe como hacerme reír.
"Jajajaj eres un idiota..."
"Puede ser, pero no tanto como para embrazar a una chica, ¿como te atreves a creer que podría?"- me dice ben.
"No lo se, eres capaz"- le digo dubitativa
"Me lastimas johnson"- dice haciéndose el herido-" bueno, ya tengo que irme, mi padre me pide ayuda, vaya a saber para que, adiós princesa!..ah, no, espera, estoy enojado contigo, entonces solo te diré adiós"- lo escucho decir mientras se oyen los gritos de su padre atrás.
"De acuerdo, adiós ben, te quiero!"- digo y corto.
*fin del flashback*
Abro los ojos, y sigo en aquella estúpida camilla, ojala los sueños fueran verdade...- pensaba, cuando algo interrumpe mis pensamientos. ¡No puedo respirar! Con la poca fuerza que tenia trate de gritar, pero nada, ningún sonido salió de mi boca, luego recordé. Siempre hay un control en mi mesita para llamar a la enfermera inmediatamente pero no lo alcanzo! Me estiré lo mas que pude para alcanzarlo pero no podía, ya casi no sentía mi cuerpo. Ya me estaba desvaneciendo cuando decidí tirarme.


Recuerdos AccidentadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora