Amor Clandestino

C8. Provocativa.

Pasaron dos días hermosos pero ya tenían que volver, a regresar otra ves a la rutina, pasaron 2 meses más, ellas cada ves más juntas, Sofia había hablado con Alberto sobre el divorcio, con la excusa de que ya nada era igual...

Alberto: Pero no entiendo porque ahora.

Sofia: Porque quizá quería mantener esto por Zami, pero ya para que Alberto, no nos vemos nunca, tantos años juntos y no conoces todo de mi, jamás un detalle, tantas veces te esperé con ropa nueva, o un nuevo peinado y tu ni cuenta te dabas, hasta a veces no llegabas.

Alberto: Sabes que soy así.

Sofia: Si, se que nos casamos porque estaba embarazada, pero éramos muy adultos y sabíamos lo que hacíamos, no lo digo solo por mi, también por tu hija, ella te extraña, te perdiste tantos eventos, el colegio, graduación, sus clases de patín, hasta cosas de adolescentes.

Alberto: Para eso estás tú, además sino trabajo no tendrían todo lo que tienen.

Sofia: ¿Me amas?

Alberto: Pero...si, claro, te quiero.

Sofia: Te pregunté si me amas, ninguno de los dos estaba enamorado cuando nos casamos, lo hicimos por la bebé y tú siempre culpandome a mi de todo lo malo que le pasaba.

Alberto: Tu eres quien la cuida.

Sofia: Tu eres su papá, Alberto ya!! Para que quieres seguir conmigo, para que?

Alberto: Si, quizá tienes razón, pero no quiero que esto haga que Zami me deje de ver.

Sofia: Claro que no, ella siempre será tu hija.

Alberto: Ya tengo que irme, después hablamos.

Sofia: Ok, adiós.

Zamira: ¿Le pasa algo a papá?

Sofia: Ven amor, necesitamos hablar.

Zamira: ¿Que pasa?

Sofia: Tu papá y yo sabes que ya no tenemos una relación como antes y hablamos...

Zamira: ¿Se van a separar?

Sofia: Si, le pedí el divorcio, pero quiero que sepas que lo verás siempre, esto no quiere decir nada.

Zamira: Mamá, siempre pensé que era lo mejor, él nunca está y estar divorciados te hace más libre y no tener que esperarlo y ponerte mal cuando no llega, aunque lo vea igual en su casa, ahora seremos nosotras dos, como hasta ahora y tú te sentirás más libre má.

Sofia: Te amo mi vida, tu siempre comprendes todo.

Zamira: Yo te amo más mami (la abrazó).

Café

Karina: Diana, cómo estás?

Diana: Hola Kari.

Karina: ¿Lo sé siempre?

Diana: Si gracias.

Franky: Y para mí también (llegando).

Diana: Demoras demasiado.

Franky: Tu caminas muy rápido mensa.

Diana: ¿Dónde está Sofi?

Karina: Está con un proveedor, es que llegaron unos encargos, voy por sus pedidos.

Sofia: Gracias y espero el resto para la semana que viene.

Proveedor: Con gusto, una excusa para verte (Diana desde su mesa lo fulminó con la mirada).

Sofia: Aquí tienes el dinero y gracias.

Proveedor: Nos vemos preciosa.

Sofia: Adiós.

Diana: Vamos Fran.

Franky: Pero si no tomamos nada.

Diana: Dije vamos.

Sofia: Hola, ya se van?

Diana: Si, tenemos que trabajar.

Sofia: Diana...

Diana: No tengo tiempo (lléndose).

Karina: ¿Se fueron? Pero no les traje el pedido aún.

Sofia: ¿Que paso?

En la oficina de Diana

Franky: ¿Me puedes decir que fue todo eso?

Diana: Recordé que tenía mucho trabajo.

Franky: Ay Diana te conozco, fue por ese proveedor ¿No? No seas tonta, ella jamás le haría caso a nadie.

Diana: No lo sé (sería).

Franky: Sabes que no y además me dejaste sin mi desayuno por tus benditos celos.

Diana: Ya!! Ve tu a desayunar si quieres, déjame en paz.

Franky: Ash, si claro que iré, loca!! (lléndose).

En la noche ya que Diana no respondía, Sofia fue a su departamento...

Sofia: ¿No pensabas responderme o que? Que te pasa amor?

Diana: A mi nada.

Sofia: Diana, te fuiste del café, no respondías mis llamadas, Fran me dijo porque era, no seas tonta, es solo el proveedor que trae los alimentos.

Diana: Y porque tanta sonrisa, hasta preciosa te dijo.

Sofia: Amor, tu no eres así de celosa, sabes que tengo ojos solo para ti, simplemente no quise ser grosera.

Diana: Si claro, me voy a comer algo y a acostar, estoy cansada, has lo que quieras.

Sofia: Ash Diana!!!

Diana se sentó a comer en la cocina, cuando de repente Sofia paso en ropa interior, se sirvió agua y se fue a la habitación, Diana se quedó de boca abierta...
En la habitación, Diana no veía a Sofi, se recostó y la vió salir del baño igual que antes...

Diana: ¿Se puede saber que haces así?

Sofia: ¿Así como?

Diana: En ropa interior Sofia.

Sofia: Tu me dijiste que está ya es mi casa, pues...ando por mi casa cómoda, que tiene?

Diana: Sofia!!

Sofia: ¿Que? (se dió la vuelta y sonrió).

Diana se levanto de la cama y la tomó de la cintura por detrás...

Diana: ¿Me estás provocando? (pegándola a ella).

Sofia: ¿Yo? (se dió la vuelta quedando frente a ella) para nada.

Diana: ¿A no?

Sofia: En todo caso...haría esto para provocarte (quitándose el brasier).

Diana se mordió el labio, apretó los senos de Sofía y la besó, llevándola a la cama, entre caricias, besos, sus lenguas jugaban sin parar, pasión, lujuria, Sofia encima de Diana besando la intimidad, en una posición que Diana también besaba la suya, ambas dándose placer, juntas, en la cama no le tenían miedo a nada, después de hacer el amor, se miraron y sonrieron...

Diana: Si me vas a convencer así creo que me van a dar muchos ataques de celos.

Sofia: No tienes porque tenerlos mi amor, jamás podría mirar a nadie.

Diana: Lo se pero me dió mucha rabia ver a ese idiota coqueteando a mi mujer.

Sofia: Por todo esto no pude decirte que ya hable con Alberto, le pedí el divorcio.

Diana: ¿De verdad?

Sofia: Mhm y me dijo que si.

Diana: Ay mi amor (dando pequeños besos en su cara).

Sofia: Solo falta Zami, pero eso sí me da miedo.

Diana: Va a estar todo bien, vamos de a poco, pronto podremos vivir juntas ¿te gustaría?

Sofia: Me encantaría, además podría pasear por la casa así en ropa interior o quizá sin nada (riendo).

Diana: Sofia!!!

Sofia: En mi casa hago lo que quiera.

Diana: En qué se convirtió mi Sofi...pero me encanta (la pegó a ella y la besó).