Cap. 3

1.2K 75 18
                                    

Narra T/n

Pasó un rato desde que la madre de Adam se fue y fuimos a su habitación.

Adam: ¿Quieres jugar a videojuegos?

Yo: ¿Tu madre no ha dicho que no?

Adam: Exacto.

Yo solté una risa y me senté a su lado.

Yo: Juguemos.

Adam: Qué malota.

Yo: ¿Has visto? Toda una gangster.

Adam se rió y encendió el juego.

Yo: Adam voy a beber agua, ahora vengo.

Adam: Está bien, pero la nevera no cierra-

Yo: No pasa nada, beberé agua del grifo.

Adam: Como quieras.

Bajé las escaleras y llegué a la cocina. Cogí un baso y lo llené de agua del grifo, me lo bebí y subí las escaleras, pero subiendo se fue la luz y casi me caigo. Además, el perro de Adam, Hawking, bajó las escaleras corriendo y ladrando como loco y me asustó .

Yo: ¡AY! HIJOEPUTA CASI MUERO

Adam bajó las escaleras hasta llegar conmigo.

Adam: ¿Estás bien?

Yo: Sisisi perfectamente, ¿no lo ves? Solo he estado a punto de morir.

Adam: Dramática.

El perro de Adam seguía ladrándole a la puerta y nosotros nos miramos. Adam cogió una linterna y lo seguimos hasta fuera. Hawking seguía ladrando.

Adam: ¿Qué pasa? ¿Ves algo?

Yo: Es un perro, no te va a responder...

Adam: Ya lo sé, genia.

El perro de Adam salió corriendo en dirección al bosque.

Adam: ¡Hawking, para! ¡Hawking!

Nos quedamos mirando como se iba el perro y Adam empezó a correr tras él, yo los seguí. Pasamos por delante de un bate y yo lo agarré con firmeza. Seguimos caminando y no lo encontrábamos.

Adam: ¡Hawking!

Yo: ¡¿Dónde estás?!

Empezamos a caminar y de pronto vimos como las hojas de los árboles estaban quemándose y se caían.

Yo: Wow....

Mirábamos hipnotizados los árboles cuando de repente salió Hawking ladrando de los arbustos, lo que nos hizo saltar del susto.

Adam: Me has dado un susto de muerte...

Dijo suspirando aliviado al igual que yo, pero escuchamos algo detrás nuestro y nos asustamos.

Adam: ¿¡Quién anda ahí?!

Yo: No creo que debamos estar aquí.

Él negó y empezamos a correr hacia su casa. Cuando estábamos delante, Adam empezó a respirar mal.

Yo: ¿Estás bien?

Dije preocupada.

Adam: Sólo un ataque de asma.

Dijo poniéndose el inhalador en la boca y respirando mejor. Se agachó para acariciar al perro.

Adam: Estamos bien...

Dijo en un suspiro.

Yo: Eso espero.

Se escuchó un ruido en el garaje y los dos nos miramos asustados. Hawking corrió hacia el sonido y Adam se levantó y empezó a seguirlo.

Yo: ¿Vas a entrar?

Dije estupefacta.

Adam: ¿Sí...?

Yo: ¿Tú ves pelis de miedo? ¡Así es como acaba muerto el amigo del prota!

Adam: Voy a entrar.

Yo: ¡Y una mierda, vas a morir, tío! ¿Te quieres morir?

Adam: ¿No?

Yo: ¡Pues no entres!

Adam: No hace falta que entres si no quieres, quédate a fuera.

Yo: ¡Si anda! ¿Para que me vean sola y me maten? Ni de coña, entro contigo.

Adam: A veces no te entiendo.

Yo: SHHHH

Lo callé para no hacer ruido ya que estábamos entrando. Todo estaba muy silencioso y Adam alumbró todo el lugar con su linterna, pero enfocó a un hombre.

X: No os asustéis...

Adam y yo pegamos un grito y como Adam estaba delante mío y se cayó yo también me caí.

X: O bueno, tírala al suelo y gritad.

Nos levantamos muy rápido y encendí la luz.

Adam: ¿¡Quién diablos eres?!

Yo le apunté con el bate.

X: ¡Suelta el bate! No voy a haceros daño, hombre.

Yo: ¿Qué haces aquí?

X: Sangrar sobre todo... Espera, oye ¿qué edad tenéis?

Adam: ¿Qué?

X: Que ¿QUÉ EDAD TENEIS?

Adam y Yo: 15

(aquí tendrán 15 porque me parece una edad más apropiada para que se enamoren, creo que con 12 son muy pequeños)

X: 15... Mierda.

Adam: ¿¡Cómo has entrado en el garaje de mi padre?!

X: Estaba abierto.

Adam: No, no es verdad.

Yo: Eso es un traje de vuelo, ¿eres piloto?

X: Sí... Sí.. Escucharme.

Yo saqué mi teléfono.

X: No, no, no llames a nadie. Suelta el móvil, no os haré daño.

Yo: Sí, eso ya lo has dicho.

X: Bueno, no merece la pena repetirlo.

Le empezó a salir mucha sangre.

Yo: Wow eso es mucha sangre.

X: Bueno, tengo mucha más en el cuerpo... ¿Dónde está tu madre?

Adam: En una cita.

X: ¿Con quién?

Adam: ¿Qué?

X: ¿CON QUIÉN? Cómo se llama

Adam: No lo sé.

Yo: ¿Es que no escuchas a tu madre? Es Derek.

X: Derek... Derek...

Dijo pensativo.

X: Vale sí. El tío con esa cresta en la boca.

Adam: ¿La perilla?

X: Sí.

Yo: Pues di perilla.

X: Eso no es importante.

Adam: Ninguno lo es.

Los dos nos fijamos en que Hawking estaba muy a gusto con el desconocido.

X: Bonito perro.

El hombre se levantó.

X: Voy a entrar en casa, cogeré algunas cosas.

Iba a darle con el bate cuando pasó por nuestro lado pero él lo cogió y lo lanzó.

X: Y quedaos aquí.

El señor estaba saliendo cuando se acercó una mujer.

X2: Hey.

X: Hola, voy a entrar, necesito curar mi herida.

X2: Espera... ¿Esos son...?

Dijo mirándonos.

X: Sí.



El Proyecto Adam - Adam y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora