Cap 4 Celos

10 3 0
                                    


- Psicóloga: Sí he leído tu ficha. Así que dime ¿por qué mataste a mi hermana?

- Yo: Ahora veo porque me recordabas tanto a ella. No quiero seguir con esta sesión.

- Psicóloga: Me merezco saber la verdad, merezco saber cómo un amor tan puro se vuelve algo tan oscuro, necesito saber porque a pesar de querer a alguien, llegaste a ser capaz de herirle. No seas un monstruo hasta el final, quiero saberlo todo. Deja que descase su cadáver.

- Yo: La figura de los celos.

- Psicóloga: ¿Celos?

- Yo: Los celos son ese sentimiento que te marcan, que te queman por dentro y que te desgarran la mente lentamente. Un sentimiento que Según Kant; "El hombre es celoso si ama; la mujer también, aunque no ame" ¿El amor y la pasión manifiestan los celos?

- Psicóloga: ¡¿Celos?!

- Yo: Bueno, en mi opinión, solo puedo decir algo bien claro; Sentía como el cielo se desmoronaba, no porque tuviese celos, sino porque de alguna manera, estaba mal sentirse así. Viendo a la persona que amaba, a la persona que prometía con sus manos, con sus labios, con sus ojos, que sus sentimientos eran suyos y que su corazón también, jugando alegremente con otra persona dentro y fuera de una cama. Llámenme antiguado, pues aún creo en el romanticismo. En esa parte de la historia que dejaba que hablaran los corazones antes que la razón. Y me duele pensar, en que cada día muere un poco. Sentir de más está mal, y eso está mal. No sabía cómo se sentía, como combatir esos sentimientos que nacen y como fuego con pólvora, lo devoran todo por dentro.

- Psicóloga: No necesito oír más.

- Yo: Tome asiento, el final va a darle la respuesta a todo lo que ocurrió desde el principio.

- Psicóloga: Acabemos de una vez.

- Yo: Ser un posesivo, un controlador, una persona que se creé con derechos sobre otra, y si no recuerdo mal, ya no estamos en tiempos de esclavitud y mucho menos quería ser tomado un esclavista enamorado.

- Psicóloga: No lo entiendo, porqué sigue hablando en tercera persona.

- Yo: Porque yo no maté a su hermana.

- Psicóloga: Veo que estar aquí encerrado le está pasando factura, usted confesó varias veces, hay pruebas, tenía el cuerpo en un armario. ¡Me está vacilando!

- Yo: Ahora es mi turno ¿Le confieso algo? Nací con un don horrible.

Pero lo dejo, me rindo, la sociedad no está de mi parte, la verdad la tiene la mayoría, la victima nunca es la parte que más sufre, sino la parte que puede actuar más como una

víctima. Adelante, denme un consejo, porque me estoy muriendo,

me estoy muriendo y el veneno es ser el único que sabe la verdad, o quizás es el amor, o quizás el dolor, o quizás soy yo.

- Psicóloga: ¡No se vaya! ¡No entendí nada! ¡Qué está pasando!

- Yo: Me recuerda demasiado a ella.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 25, 2022 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

CadáveresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora