Luna Negra.

Capitulo 16.

Su corazón latía con rapidez, las lágrimas se acurrucaban en sus ojos para caer silenciosas como grandes cascadas, sus ropas estaban algo chamuscadas y su delgado cuerpo tenia pequeñas manchas de hollín junto con moretones, manchas de sangre y lodo, la guerra se había desatado hacia unas horas atrás, sus padres habían ido en busca de refugio con sus hermanos y algunos híbridos, miro a su alrededor concentrándose en lo que debía hacer ella seria era el alfa líder de una sub-división en la manada, debía ser fuerte, cerro sus ojos dejando salir un ligero sollozo lastimero, apretó los puños y se dejó caer al suelo de tierra, abrió sus manos y enterró sus dedos en las tierra algo húmeda

- ¿Dónde rayos estas Min? - abrió sus ojos al escuchar la voz de YoungSok un centinela de su padre

- Princesa Min - dijo ella saliendo de una pequeña cabaña empuñando una espada plateada y de mango blanco con ligeras piedras azules - Es princesa Min - el hombre se quedó sin aliento a ver aquellos ojos naranjas brillantes ante la luz de la luna

- Su padre... -intentó hablar el hombre más ella le interrumpió

- Mi padre debe descansar mi hermana y yo regresaremos pronto - ella se dio la vuelta caminando hacia el espeso bosque donde se desataba la llamada Guerra de Híbridos, algunos alfas de la sub-división estaban esperándola.

- Escuchen atentamente - esperó mirando a los quince alfas frente a ella - el plan sigue en pie - su voz era más rígida y fría - no quiero distracciones - todos asintieron - La guerra entre híbridos y humanos está aquí - bramó con voz fuerte y contundente - nosotros, las criaturas milenarias acabaremos con esto - los alfas gritaron alzando sus espadas - nosotros, la manada Eurus, seremos lo que tanto han pedido - nuevamente los alfas gritaron eufóricos, sus corazones latían frenéticos y llenos de vigor por ganar aquella lucha - El viento del este esta cerca - dijo alzando su espada - y nosotros seremos el viento- los gritos se desataron el el lugar, el orgullo y esperanza nació en sus pechos eufóricos.

La manada fue dirigida a donde algunos alfas mas grandes peleaban

-¿Donde rayos estaban Min? - la voz de su hermana salio de entre el en ramaje al igual que aquella chica de cabellos azabaches, ojos azules y piel morena - el ataque esta por empezar - la nombrada ignoró a la mayor y camino hacia delante - ¿Que crees que estas haciendo cachorra? - se levanto para intentar tomarla del brazo pero tal fue su sorpresa que cayo al suelo.

Como se sabe, la hija mediana de la familia Min es alguien fuerte y de temperamento rígido con sus alfas guerreros, su mirada fría no decía mucho en realidad, su rostro inexpresivo era agrio y áspero pero en ese momento HyeMoon diviso venganza en aquellos ojos naranjas los cuales demostraban haber llorado

- T-tu - la menor volteo su mirada hacia ella - tu no eres T-tae - su cuerpo tembló y aquellos ojos brillaron con intensidad

- Vamos - gruñó ella ignorando a su hermana

*Horas después*

- Hija NO - se escuchó la voz de su padre la cual resonó por toda el área hasta llegar a sus oídos, su mirada brilladora lo miraron desde el fondo del bosque - regresa mi pequeña - susurró sin embargo su respuesta fue el sonido de una espada cortar algo

En las pocas horas en las que la guerra se desató el señor Min fue avisado de un segundo ataque en la aldea, y ambas de sus hijas estaba ahí, corrió junto a sus centinelas hasta llegar al lugar

- Papá - HyeMoon salio con torpeza de las ramas caídas - ella no es tae - una bocada de sangre salio de sus labios, sin pensarlo mucho el hombre tomó a su hija y reviso su abdomen encontrando una herida en cerca de su estomago

- Llevársela al refugio - ordeno a sus hombres los cuales asintieron y la tomaron de brazos

- ¿Qué? no - se removió de el agarra de los centinelas quienes la soltaron - no me puedo ir papá mi hermana necesita.. - no terminó la frase cuando cayo inconsciente

- Llevársela y que Luna la cure - otra voz salió de entre la oscuridad y los centinelas se la llevaron entre brazos - tranquilo YiBo - dijo parándose detrás del hombre - tu hija sabe lo que hace - ambos observaron a los alfas jóvenes pelear

- Pero ella... - miro a su hija quien peleaba sin justicia, sus movimientos eran preciosos por lo que era una pelea limpia - es mi hija debes comprenderme, tu tienes una - ambos se miraron mas un grito doloroso les regresó la mirada al frente.

- ¿Que hace? - preguntó su padre frunciendo el ceño

- Creo que haz ganado esta lucha vamos a ver que pasa - ambos hombres caminaron

la voz de la chica cada vez fue más clara hasta que estuvieron lo suficientemente cerca

- ¿Quien eres? - pregunto un hombre de apariencia pobre y magullada, tenia sangre y lodo en todo el cuerpo

- Mi nombre es Min Tae Moon - bramó con la voz imponente - hija de el sol y la luna - dijo eso refiriéndose a su padre quien la miraba desde los en ramajes oculto - futura alfa de una pequeña manada y esposa de la omega mas noble del mundo híbrido - y tu - lo apuntó con su espada brillante y manchada de sangre - tu eres que traicionó a nuestra manada - acercó vertiginosamente la punta a su cuello - tu eres el desgraciado que morirá hoy - la chica levantó el arma y cortó el cuello del hombre, se escucho un zing de la noble espada seguido del cuerpo inerte del hombre.

Los gritos de los alfas no se hicieron esperar, la victoria invadió sus pechos y caminaron en busca del camino hacia el refugio

- Esto aun no se acaba - la chica volteo encontrándose con la mirada de un hombre agonizante - cuando mi rey se entere ustedes aberr... - una risa escandalosa se hizo presente

- No me hagas reír - dijo agachándose mientras se apoyaba de su espada - tu rey que ¿nos derrotara mandado mas guerreros? - se rió jugando con sus espada vacilante - que lo haga veamos quien se rinde primero - y después de esas palabras enterró la punta en el corazón el hombre.

Ella se tambaleo confundida y su padre la miro confundido desde la oscuridad, la chica se tomó la cabeza adolorida y cayo al suelo de rodillas

- Salgan de ahí - hablo con la voz fría - se que estás ahí - se levanto con torpeza y su padre caminó hacia la luz preocupado junto a un hombre sonriente y fascinado con la fuerza y sangre fría de la hija de aquel alfa - no, no ustedes, ella - apuntó hacia un punto oscuro del cual salio Amber la hija del hombre el cual acompañaba a su padre

- ¿Que haces aquí? - preguntó su padre, la menor estaba apunto de contestar cuando ella le interrumpió

- Les viene siguiendo desde que salieron - le apunto con la espada - agradezca que mande a mis mejores alfas para protegerla y ellos no le hagan nada - caminó hasta su padre - papá yo... - observo su mirada dura, molesta, asustada, disgustada y triste - perd...- el viento frío soplo y un olor dulce, como azúcar se coló es su nariz embriagadora por completo.

La confusión le hizo fruncir el ceño y con los ojos cansados miró a su padre nuevamente

-No era yo - su ojos se cerraron y YiBo la tomo entre sus brazos.