Capitulo 4

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La princesa beso el dobladillo de su majestad y espero que el la levantará, Suleiman levanto con ambas manos a su hija.

Suleiman: Nos vamos ahora mismo a la sala de reuniones y llamaremos a todos los pashas para notificar está nueva ley. - Hablo con orgullo y miro a Mahidevran enojado.-

Mustafa: Padre. -Dijo con el ceño fruncido y miro a su hermana mayor.-

___: Vamos príncipe debes estar a mí lado. - Hablo con cariño y extendió su mano para que su hermano la tomara.-

El pequeño príncipe sonrió, eso era lo que más quería estar con su hermana y aprender de ella.
La princesa había entrenado desde que tenía memoria y se esforzaba demasiado en sus estudios, era y es la aprendiz más brillante que cualquier maestro podía tener, más de un maestro había le había dicho al Sultán que sino fuera mujer ella sería una gran gobernante a lo cual el sultán se preguntaba por que su hija no podía ascender al trono.

Mustafa: Iré con ustedes y mí hermana luego me enseñará a pelear con la espada. -Tomo la mano de su hermana.-

Mahidevran miraba con odio a la princesa, no podía creer como le estaban dando ese lugar a una simple princesa mas del imperio, no queria ver a la mujer pelirroja que estaba a su lado sabia que estaba sonriendo de oreja.

Mahidevra: Felicidades serpiente, haz comenzado una guerra y lastimosamente tu querido amor sera quien pierda la vida. -Dijo con odio y sin mirar a la pelirroja se marcho.-

Hurrem miro la espalda de la sultana mahidevran y fruncio el ceño, el mes antes de esto habia sido intenso para ambas mujeres ya que mas de una vez han intentado matarla en el harem por mismas ordenes de la sultana y aunque supo ocultal casi todo intento de asesinato que habia sufrido sabia que su princesa lo sabia.

Hurrem: Necesitare aliados para proteger a mi princesa.-Hablo en voz alta mientras caminaba a los aposentos de la princesa-

Hurrem no solo debia cuidar sus espaldas de los enemigo sino tambien de la misma princesa debia tener cuidado, las amenazas de Nigar con que debia tener cuidado de no embarazar a la princesa siempre la desconcentraban cuando mas de una noche esta la buscaba para disfrutar de su cuerpo, Hurrem habia aprendido a controlar a la deseosa princesa con otros tipos de juegos y otra manera de tocarla pero la princesa siempre deseaba mas de ella.

*Dos noches antes*

La princesa estaba encima de la pelirroja besando deseosa los labios carnosos de esta dejándola sin aliento mientras con sus manos acariciaba de arriba a bajo todo su torso.

__: No más juego rosa.-Susurro en oído de esta extremeciendo cada parte de su interior.- Te quiero dentro de mí. -Volvio a susurra llena de lujuria.

La pelirroja apretaba sus labios intentando contenerse nuevamente ante esta mujer lujuriosa que pedía a gritos que la complacieran de una vez.

___: Hurrem no me hagas rogarte, se buena chica para mí. - Miro directamente a los ojos haciendo que suspirara cautivada.-

Hurrem: Princesa intentemos un nuevo juego. - Quito lentamente las juguetonas manos de la joven princesa de su entrepierna, no recuerda en que momento llegaron allí pero estaban ahí.-

__: No quiero juegos solo te quiero encima de mí. - Hablo un tanto frustrada de las excusas de la pelirroja y volvió a poner sus manos en su entrepierna para tomar el miembro erecto está.- El no quiere juegos, el quiere estar adentro de mí. - Dijo coqueta mientras estimulaba su miembro, apoyo su frente con la contraria y mantuvo el contacto visual.- ¿Te gusta?. -La pelirroja estaba a su merced difrutando de este estímulo y la princesa sonrió complacida al ver su rostro.-

Solo por tu amor(La sultána Hurrem y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora