*8 meses después, Palacio otomano*
"La ciudad se ha convertido en un triste cuento helado, más allá de la blanca nieve que cae, la ciudad se convirtió en una montaña helada por su indiferencia, he mando cartas con disculpas la primera semana que el hielo se convirtió en usted, el primer mes las cartas seguí enviando pero no obtuve respuesta y su distancia aumento, en la fiesta de nuestros hijos no se presentó pero su favorita si y no me gusta admitirlo le rogué que me explicará por qué ya no desea verme pero se hizo la desentendida. El sultán se fue y con el su aprecio falso por mi, ¿Por qué hace esto Princesa?.
Atentamente Mahidevran."
Leyó la carta y al terminar tiró al fuego el papel, la princesa llevaba meses ignorando a la Sultana mahidevran pero ella parecía no entender que su vínculo jamás se formaría nuevamente. Sería cruel de su parte seguir torturando a la castaña con su presencia, le molestaba saber que Mahidevran la veía con otros ojos, ¿Sería que todos eran consientes de ese enamoramiento? No quería averiguar si era notorio o no así que decidió abandonar completamente el contacto con Mahidevran a menos que sea de extrema necesidad.
Miray: Princesa. -Llamo a la pelinegra que estaba mirando el fuego.-
___: No tengo asuntos. -Hablo con seriedad y miro a la castaña que estaba dentro de sus aposentos.-
El sultán antes de irse dejo una gran responsabilidad a la princesa que la estaba estresando más de la cuenta, creía que las embarazadas tenía algún privilegio pero no, desde que su padre la dejo a la cabeza del imperio sus días eran: reuniones y planificaciones sobre nuevas obras, asuntos del pueblo y llevar unas cuentas excesivamente largas sobre los gastos del imperio, la lista pareciera que no se acabará al enumerar todas las cosas que hacía en un solo día y sin agregar que su vientre creció con rapidez y su espalda no agradeció el peso extra.
Miray: Lleva dos horas leyendo esa carta que acaba de tirar en el fuego. -Explico con tranquilidad para no provocar un regaño de parte de la princesa, se había vuelto inflexible con la castaña y cada error era castigo sin miedo alguno.- Y el bebé debe estar cansado al igual que su poderosa madre. - Halago a la pelinegra que le mostró una mínima sonrisa.-
__: Mi bebé y yo estamos bien. - Hablo con suavidad y se fue a sentar en la cama de sus aposentos.- ¿Algo más o seguirás parada ahí mirando como no hago nada?. -Cuestiono molesta y la castaña nego.-
Miray: El fuerte de las Quimeras reales está terminando, déjeme decir que es hermoso y las mujeres nos encanta.- Hablo entusiasmada y la pelinegra volvió a sonreír.- Y las sultanas están haciendo una fiesta por el regreso del Gran Sultán Suileiman....- Hizo una pausa para decirle lo que seguro terminaría en una pelinegra muy molesta y que la echaba de los aposentos.- Debería salir un poco cuando está libre y disfrutar de su familia...- Explico con preocupación por el bienestar de la princesa, había pasado una semana entera encerrada en sus aposentos solo recibiendo a la servidumbre que ni siquiera la veían por qué la princesa salía a la terraza lo cual siempre alarmaban a Burak y Miray por qué afuera era pleno invierno otomano.-
___:Oh claro lo he olvidado...- Hablo pensativa mirando hacia el techo en busca de alguna respuesta.-
Miray: ¿El que olvidó princesa?.-Hablo confundida y cuando vio a la pelinegra cambiaba totalmente su rostro sereno y ralajado a uno enfadado y serio.-
___: He olvidó si en algún momento te pedí saber cuál es mi deber. -El filo en las palabras de la pelinegra solamente hizo temblar e hizo lo más correcto en ese momento y sin decir una sola palabra se reverencio ante la princesa y se marchó de allí lo antes posible.-
La princesa miro molesta a la joven mientras se marchaba, todo el día tenía que lidiar con Miray haciendo saber que está descuidando sus vínculos familiares y deseaba saber cuál era el problema, las preguntas fueron más fuertes cuando la pelinegra ordenó no dejar pasar a nadie incluyendo a Hurrem en esa lista, no estaba enojada con su amada rosa solo deseaba tiempo a solas con sus pensamientos, estaba todo momento con pashas que no paraban de hablar y hablar, Hurrem se lo tomó muy mal pero no dejaría que la vieran triste por ser ignorada.
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Solo por tu amor(La sultána Hurrem y tu)
FanfictionEl joven príncipe suleiman asumió el trono del imperio tras la muerte de su padre el sultan Selim junto a el llegará al palacio su amada hija mayor para integrarse finalmente en el imperio otomano. En un pueblo pequeño de Crimea una joven pelirroja...