Adrinette April 2021

Día 8 - Comisiones

388 palabras

Adrien definitivamente no dudaba del increíble talento que Marinette tenía para las artes, manualidades y costura de ropa; se ponía muy contento al verla regalarle creaciones hechas por ella misma a sus amigos. Estaba tan orgulloso de mirarla feliz obsequiando un poco de su talento como regalo para gente que querían, por lo que algunos ya le habían pedido comisiones.

Al enterarse del blog de moda de la azabache, el rubio le estuvo dando una revisada diaria para que siempre quedara muy impresionado con los nuevos bocetos y prendas ya fabricadas, además de que también tenía interés en pedirle una comisión.

La chica se encontraba sentada dibujando más bocetos nuevos e inspirada en su cuaderno de dibujo, así que él se acercó para pedirle lo que quería.

- Hola, Marinette. - Saludó el chico.

La ojiazul levantó la vista para toparse con el hermoso rostro de su enamorado, por lo que sonrió y le devolvió el saludo.

- Hola, A-Adrien.

- Supe de las comisiones que estabas haciendo con nuestros amigos, y estaba pensando si yo también te podría pedir una.

- Me encantaría, pero no te molestes en pagar, yo te lo puedo regalar gratis.

- No, insisto, quiero pagar porque estoy seguro de que lo que me hagas te quedará asombroso, como siempre.

- Ah, bueno, gracias. Está bien.

Al hacer el acuerdo y haber terminado las clases, Marinette se fue a su casa corriendo a su habitación para hacer lo que Adrien le había pedido: un abrigo de Ladybug, le parecía muy tierno de su parte. Luego pensó en algo mejor, y le envió un mensaje a Adrien para ver si él podría venir a su casa a recoger la comisión; a los pocos minutos recibió la respuesta afirmativa de parte del ojiverde.

Cuando llegó el día siguiente, a las 10:00 a.m. se presentó el chico en el hogar de su enamorada, saludó a sus padres quienes estaban trabajando en la panadería y fue subiendo directo a su habitación.

Ahí ella ya lo esperaba no solamente con el abrigo de Ladybug listo, sino que también portaba un abrigo de Cat Noir, que hacían juego uno con el otro, por lo que sonrió al verlo sonreír.

El chico le dio su paga y se puso el abrigo de Ladybug, muy contento tanto por lo bien que se veía como se sentía.

Junto a ella, era muy divertido negociar comisiones.

------------

Día 8 terminado

Nunca le he pedido una comisión a nadie, pero verlo entre estos tórtolos no estaría mal. 😊

Siguiente: Día 9 – Lecciones de repostería

- Carmen