Hijo de la luna / 𝐾𝑂𝑂𝐾𝑇𝐴𝐸 / 𝘖𝘮𝘦𝘨𝘢𝘷𝘦𝘳𝘴𝘦

𝓟𝓻𝓸𝓵𝓸𝓰𝓸

Prólogo
•*. Hijo de la luna .*•

Año: 1885, primeras semanas de enero

Una omega corría por el bosque en busca de escapar de aquel cruel destino que se le avecinaba estando en manos del alfa que amaba. Siendo perseguida con él detrás, mientras este sostenía en su mano el cuchillo que acabaría con su vida.

Ese hombre por el cual rogó a la luna que estuviera en su vida, que la amara como nunca nadie lo había hecho y que le quitara esa tristeza en la que vivía anteriormente. A cambio, le daría a la madre luna algo que añoraba desde lo más profundo de su ser.

Sin embargo, ese amor que se tenían, es amor que se profesaban, se vio destrozado en un santiamén cuando su hijo vino al mundo. Nacido un 30 de diciembre de 1985 en luna llena, siendo esta la espectadora del nacimiento de quien sería su más Preciado tesoro. Poseyendo una piel clara y ojos grises con pequeños brillos blancos, creando la imagen más inocente y pura que se haya visto, fue como vino Kim Taehyung al mundo.

Ese mismo bebé de desconocida procedencia sobre su aspecto, fue el motivo por el cual aquel alfa de piel morena estuviera persiguiendo a su esposa para matarla con sus propias manos.

*****

Minutos antes

Él fue seguramente el último en ver a su hijo, puesto que se había ido de viaje al pueblo del reino Daegu hace un mes para traer alimentos a su hogar y prendas nuevas para su omega, y también ropa pequeña para su bebé que, supuso, nacería mientras estuviera de viaje. Estaba más que contento de ver al fruto que nació del amor que se tenían él y su omega.

Cuando entró a la habitación donde dormían, lo primero que notó fue la apariencia demacrada y agotada de ella, pero aun así se veía hermosa sin importar su aspecto, y aún más hermosa sosteniendo su bebé en brazos.

Sintiendo que en algún momento se desmayaría al sentir tantos sentimientos venir hacia él, se acercó a su omega con pasos lentos y se posicionó a su costado conectando miradas con ella. Al ver más con detenidamente su cara, vio miedo pasar en sus relucientes ojos verdes, pensó que era porque temía que alguien la apartara de su cachorro, por lo que le acarició la cabeza intentando calmarla. Sin embargo, ella se apartó y tembló bajo su toque, para luego volver a bajar su mirada al bebé es sus brazos y acercarlo más hacia ella.

Él decidió no tomarle mucha importancia, pues pensaba que su comportamiento era debido al parto. También supuso por su falta de presencia en la hora de labor y no poder realizar juntos el lazo familiar con su hijo. Un lazo que se hace apenas nace el cachorro o la cachorra para que los reconozca como sus padres.

Se inclinó para poder ver a su bebé, pero su omega nuevamente se lo impidió al esconderlo en su pecho y cubrirlo excesivamente con la manta.

— Omega, soy yo, alfa. No te alejaré de nuestro cachorro, solo quiero verlo. ¿Me permites? — le hablo con voz suave para no alterarla.

La omega miró a su cachorro, luego a su alfa, y de nuevo regresó su mirada a su cachorro de semanas de recién nacido.

Se veía tan hermoso a pesar de no parecerse mucho, llevando casi todo lo contrario a ella; su piel más clara que la suya y sus ojos grises en vez de aceituna, y el poco cabello que tenía siendo completamente blanco en vez de marrón o negro como el de su alfa.

Ella lo consideraba como su cachorro, aun si eso no era lo correcto...

No era correcto, porque cuando le rogó e imploró a la madre luna que le enviara a un alfa para poder pasar el resto de su vida junto a él y no sentirse sola por más tiempo, la madre luna aceptó con la condición de que le diera como sacrificio a su primer hijo. Ella aceptó sin pensarlo, pues haría de todo -inclusive sacrificar a su primogénito- con tal de tener al alfa de sus sueños junta a ella.