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Dicen que la muerte es algo a lo que muchos le temen y otros tantos desean. Él la recibió como una vieja amiga que por fin pudo encontrarlo.
Huyó de esta cuando apenas era un niño, volvió a hacerlo en su adolescencia y desafortunadamente su suerte se agotó y está vez no logró esconderse a tiempo.
En sus últimos segundos de conciencia pensó en toda su vida. En su triste y traumatica niñez, en su difícil pero agradable adolescencia y en su adultez.
Recordó la primera vez que encontró a Horacio, ese muchachito que le cedió asilo en su habitación a escondida de sus padres. Ese mismo con el que huyo meses después para vivir la mejor época de su vida. La persona que más amo en el mundo. Realmente rogó para si mismo que si existía un Dios y un cielo les permita reencontrarse en el mas allá.
También recordó a sus amores, a Aiden, el primer hombre que logró robarle sus sonrojos. Quizás si hubiese huido con el a Canadá nada de esto pasaría. Luego tenemos a Jack y Viktor, los dueños de tantas primeras veces en su vida. Nunca amo tanto a nadie como lo hizo con ese par, estaba dispuesto incluso a matar por ellos, eran las personas más importantes en su día a día luego de su hermano. Sus sentidos siempre se vieron nublados ante esas hermosas sonrisas y brazos fuertes que tanto lo protegieron.
No quería fallecer con un sentimiento feo en su cuerpo, así que se aferro a todos esos buenos momentos que vivió para poder hacerlo en paz.
Tenía miedo de morir pero igualmente lo agradecía.
"Hiciste un buen trabajo Pogo, me protegiste durante años y ahora simplemente se nos fue todo de las manos a ambos... Ya no debes preocuparte más, podemos descansar al fin"
Fue su último pensamiento antes de que todo brillo de vida humana desaparezca de sus ojos y un último suspiro se escapara de sus labios.
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Volkov movía el aún caliente cuerpo de Gustabo de un lado a otro como si eso fuera a despertarlo. Se aferro a su pecho susurrando mil y un perdones, que si abría los ojos le juraba llevarlo a un hospital y llamar a su hermano para dejarlo totalmente en sus manos... lejos de ellos.
