Week Rinangry, del 23 a 29 de mayo.
•AU's (temáticas distintas)
•Rinangry.
•Narración y ortografía decente.
•Todo esto lo haré en colaboración con @/rymnasu (Twitter), si quieren ver los dibujos de lo que estoy escribiendo vayan a su perfil.
•El dib...
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Doble temática: Bonten y flores.
Sus pisadas resonaban con el acompañamiento de la humedad que se encontraba en la banqueta.
La lluvia estaba cesando, y eso le daba serenidad al no tener que estarse cubriendo con su gabardina.
Su paso fue apresurado al notar que estaba a unas cuadras de aquel local tan añorado por él.
Llevaba todo el día con ese deseo de por fin llegar.
Al estar en la puerta; con el ligero reflejo de ésta arreglo como pudo su aspecto y acomodó entre sus brazos el ramo que traía encima.
Tomó aire para exhalar lo, calmando la aceleración de su corazón sabiendo bien lo que le esperaba al ingresar.
De manera algo torpe en su intento de no causar tanto sonido abrió la puerta; pero su plan fue arruinado al escuchar la campanilla que anunciaba la llegaba a la clientela.
Ni dos pasos tuvo que dar para escuchar esa calmada voz.
—Buenas noches, disculpe pero ya cerramos, le pido por favor que se retire— ni una mirada le fue dirigida para saber quien era la persona.
Una sonrisita salió al ver como ese hombre de cabellos azules esponjosos y expresión molesta no lo había visto al estar arreglando las estanterías.
—¿En serio? ¿Ni por mí harás una excepción?— la pequeña sonrisa que soltó al decir eso causó estragos en el ruloso.
Sus ojos brillaron a ver a ese peligroso hombre parado a unos metros de la entrada de su restaurante.
—Pensé... que no vendrías hoy— el tono apagado le ardió en el fondo, no quería ni preguntar a que se debía eso.
Lo sabía muy bien.
Después de todo, siendo un mafioso perseguido y buscado por la policía no es como que te deje salir de manera frecuente sin correr riesgos.
Además... Rindou no quiere que su Souya tenga problemas con el mundo en el que se metió por su culpa. Él se merece una vida tranquila.
—Digamos que me pudieron soltar por hoy— calmó el ambiente con sus risitas, se acercó a la barra, pasando por las mesas y re observando el lugar; como si buscará una remodelacion.
Solo pudo volver a observar los detalles de los cuadros colgados, algunas fotografías de los dueños de ese lugar; solos o con sus fieles amigos.
