Money

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Diego, debo comentarte algo -

Si, ¿Que pasa? -

Diego, eh, ¿No deberías buscarte un trabajo? - El frunció el ceño - Solo digo, la fortuna de Papá no es infinita...

Tal vez no lo es pero si la suficiente como para que mi hija reciba una buena vida, si yo renunciara a ese dinero... no tengo muchas maneras de conseguir un trabajo y tu lo sabes - Diego siguió caminando, Luther lo sigue

No digo que renuncies completamente a la fortuna de papá, pero podrías trabajar y ahorrar, comprarte una casa propia-

Luther, despierta, ni aunque ahorrara toda mi vida podría comprar una casa decente, tu viste donde vivía yo antes, y si me toca ser un mantenido para que mi hija no viva en un lugar como ese pues así será - Diego había volteado y ahora estaba encarándolo

Yo nunca dije que tu fueras un mantenido, Diego -

Pero yo lo admito, tal vez, si, soy un mantenido de mierda, pero lo hago por una muy buena razón, para que mi única hija no tenga que trapear pisos o trabajar y estudiar al mismo tiempo para pagar la mierda de lugar donde vive con su padre, y tal vez tu no entiendas eso porque no tienes hijos, pero solo te pido que tu me entiendas algo, podría vender hasta mi alma al diablo con tal de que ella sufra lo menos posible, así te duela, Descansa Luther - Bajo por las escaleras dejando a Luther con la palabra en la boca

𝑳𝒂 𝒉𝒊𝒋𝒂 𝒅𝒆 𝑯𝒂𝒓𝒈𝒓𝒆𝒆𝒗𝒆𝒔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora