𝙂𝙚𝙣𝙚𝙧𝙖𝙘𝙞𝙤́𝙣 𝗦𝟲𝟮ϟ !

🎴Capítulo 10🎴

-takemichi- llamo Haruchiyo al mencionado pero este no contestó
-Takemichi!- llamo nuevamente, ganándose algunas miradas de las pocas personas que habían en el lugar y también ganándose la mirada del de ojos azules

-¿si?- pregunto el de cabello teñido
-Me estas apretando la muñeca- habló

-oh- respondió sin interés alguno

-¿quieres ir al centro comercial? Estaba aburrido y..- quería poner otra excusa pero no se le ocurrió ninguna

-bien-el de cabello blanco respondió rápidamente aceptando

Los dos chicos de ojos azules fueron caminando hasta encontrar la motocicleta del mayor de los dos, subiendo y buscando el centro comercial más cercano

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Al ya estar en el centro comercial lo que más le llamo la atención fueron las máquinas de ganchos, se vaciaron por varios pasillos viendo los peluches, figuras y demás artículos

Vieron una máquina de las tantas que hay de peluches, estaba llena de osos de peluche, pelaje rosa y ojos violetas

Se acercaron a ella y la observaron
-a que puedo sacar un peluche en el primer intento- hablo el mayor

-estas máquinas siempre están trucadas, no es sencillo sacar uno a la primera- le respondió el de pelo blanco

Hanagaki no le dio importancia a las palabras del menor, metió una moneda para poder jugar y cuando pudo mover la garra fue directo a por un peluche que estaba lo más derecho posible, tiro el gancho y las garras lo sostuvieron y como dijo el rubio

-A la primera-

Sanzu se quedó callado al ver como su rey sacaba de la máquina de peluches un oso rosa y se lo entregaba

-ten, para ti- respondió con una sonrisa sincera, luego le acarició la cabeza despeinandolo completamente y llevándose a otras máquinas

Luego de unos segundos reaccionó con un notable sonrojo que le llegaba hasta las orejas

-eh?- con una expresión de sorpresa sujeto al peluche dado por Takemichi, con el sonrojo aún presente

-up, espera Takemichi- volteo la vista para ver como el Hanagaki se olvidaba completamente de él y seguía jugando otros juegos de garra

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8:38

Al final obtuvieron una bolsa con más de 20 peluches que el rubio ganó en juegos

Se estaban llevando al estacionamiento donde el Hanagaki estacionó su moto cuando el de cicatrices habló

-take-chan- dijo el menor
-mm?-dijo sin voltear a ver ni dejar de caminar
-muchas gracias por cuanto nos divertimos hoy, ¡y muchas gracias por el peluche!- agradeció con una reverencia de unos 20 segundos

El rubio sonrió, riendo en el interior por ver al niño haciendo una reverencia ante él, se acercó y le dio un abrazo

-de nada- con una voz calmada y serena hizo que el corazón del menor se acelerara incluidas sus mejillas que se pusieron al rojo vivo

-ya, vamos a casa ya se esta haciendo la noche- el menor solo hizo caso y fue detrás del rubio para luego subirse a la moto e ir hasta su hogar

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