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Como todos los días a las 12:10 ahí estaba todo el instituto en la cantina comiendo, charlando o estudiando, ahí cada uno hacia lo que quisiera.

La mesa de los mandamases era la de Harry, era la mesa dominante, Zayn y Liam a un lado hablando de cómo le pagarían un paliza a un pobre chiquillo que sin querer se chocó con ellos por ir distraído, a su derecha estaba Josete, todos le decían así por su diminuta estatura, podía ser pequeño, pero no le toques las narices si no quieres quedarte sin testículos, él estaba bastante entretenido hablando con su chica a través del móvil, a pesar de que estuviera a su lado.

Lidia era la única chica del grupo, pero unas veces estaba y otras estaba liándola por ahí.

Harry estaba delante de todos ellos, decía que necesitaba "su espacio personal" la verdad era que si te acercabas mucho te iba a gruñir como perro, por eso no se le acercaban mucho, ni sus amigos.

Harry estaba sin decir ni una palabra, mirando por encima del hombro de Liam hacia otra mesa, tenía su vista fija desde hacía ya tiempo en un curvilíneo cuerpecito, estaba esperando a que el pequeño de ojos marinos lo mirará a él, ya que le gustaba como se sonrojaba y agachaba la mirada cuando se daba cuenta, pero estaba muy distraído hablando con su rubio amigo.

El ojiazul por fin se dio cuenta de la intensa mirada sobre él, e hizo lo que hacía cada vez que el de rizos lo miraba, se sonrojo y miró hacia abajo, tal y como el más alto predijo.

Harry soltó una sonrisa un tanto macabra, cosa que a sus amigos asustó un poco y lo miraron preguntándose qué es lo que tanto miraba. Zayn se giró y vio al pequeño con la cara rojita y hablando con sus amigo.

-¡Hey, Harry! Estamos aquí, deja de mirar a ese estúpido niño. Liam, ¿Sabes que el mocoso se calló de la silla en clase? -Soltó una carcajada seguida de la de Liam- fue tronchante amigo. - dijo el pelinegro soltando el cigarrillo.

El ojiazul se percató de que estaban hablando de él y que se estaban riendo, Niall vio como la alegría que tenía Louis en los ojos decayó al escucharlos, cortó la conversación y se levantó hacia donde estaba Harry, Louis se dio cuenta de las intenciones de su alocado amigo y se levantó también, estaba avergonzado porque casi se vuelve a caer de la silla, por suerte cada uno estaba a lo suyo y no lo vieron. Rápidamente agarró a su amigo del brazo, tirando para que no les dijera nada, toda la mesa tenía su vista fija en el espectáculo que estaban montando. Louis se murió de vergüenza en ese preciso instante y no se dio cuenta cuando Niall se soltó del agarre, ya era muy tarde, el rubio estaba dispuesto a soltarle las cuarenta a Zayn, la única reacción que se le ocurrió al más bajo fue tirarse encima de Niall para que no dijera nada, los dos cayeron al suelo justo delante de la mesa de los que se estaban burlando de él.

Eso hizo que todos los de aquella mesa se rieran aún más, llamando la atención de alguna mesa más y también se unieran a las risas.

El rubio chico en el suelo se consiguió levantar rápido y ayudar al ojiazul, ya que este no se movía por la vergüenza.

Rápidamente lo levanto y fueron corriendo a los baños, ahí Louis se echó a llorar y balbucear cosas completamente incomprensibles.

-Hey, Louis, no te preocupes cariño, ya pasó, ¿Ves? Está todo bien.

-¡No, Niall, nada está bien, estoy harto de que se metan conmigo, tengo suficiente yo solo para que me hagan nada! A demás, no sé ni porque lo hacen -Dijo sollozando mientras su amigo le limpiaba algunas lágrimas que se le habían escapado.

- Mira, Louis, creo que lo mejor que podemos hacer es decirle al director que se burlan de ti, si no, podrían llegar a más y no se... pegarte a lo mejor.

quédate conmigo pequeño • AU Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora